lunes, 27 de noviembre de 2006

Impulsores y diputados de C-PC desconocían el pasado de su líder

Incredulidad, sorpresa y más relativismo que crítica. Así puede resumirse la reacción que tuvieron ayer destacados intelectuales y dirigentes de Ciutadans-Partido de la Ciudadanía (C-PC) al saber que su líder, Albert Rivera, había escondido su afiliación a las Nuevas Generaciones del PP entre el 2002 y abril del 2006, tres meses antes de ser elegido presidente de C-PC en su congreso constituyente.

El 9 de julio, al frente de una lista transversal indefinidamente ubicada entre derecha e izquierda, Rivera se impuso como líder de C-PC por 219 votos contra los 49 de una lista escorada hacia la izquierda no nacionalista.

El catedrático de Derecho Constitucional Francesc de Carreras y el periodista Arcadi Espada, dos de los 15 intelectuales que en el 2005 impulsaron Ciutadans, admitieron ayer que desconocían "el incidente biográfico" de Rivera. Lo mismo reconoció el diputado José Domingo, número dos en la lista de Ciutadans del 1-N. Su tercer compañero con acta en el Parlament y secretario general de C-PC, Antonio Robles, no pudo ser localizado ayer por este diario.

MENTOR DESCONCERTADO

De Carreras, que cerró simbólicamente la lista electoral de Ciutadans y tuvo a Rivera como discípulo aventajado en la universidad, se negó a hacer ningún comentario sobre una noticia que, a media tarde de ayer, aún ponía en duda, máxime sin haber podido hablar antes con Rivera. Tampoco Domingo había hablado a última hora de la tarde con su jefe de filas pero, pese a su sorpresa inicial, quitó importancia a la revelación con argumentos parecidos a los que Espada sí quiso exponer.

El periodista dijo que si Rivera, al ser escogido líder de C-PC, detalló que era "votante desencantado" de CiU, PSC y PP, "también debería haber dicho que había militado" en el PP. Con todo, a Espada le parece "estupendo" que se afiliara al partido que creyera "conveniente" y denuncia que en Catalunya "para cierta opinión pública ser del PP es como ser carcelero en Auschwitz". Al filo de esta reflexión, Espada criticó que se mezcle la afiliación de Rivera con el apoyo del PP a la guerra de Irak.

ENTRE MAO Y EL LIBERALISMO

Espada, que dice que "el PP dejó escapar a un crack de la política", no ve "contradicción" en que Rivera escondiera su pasado y se presente como líder de otra forma de hacer política. Opina igual Domingo, "socialdemócrata" en un partido que "encaja" también en "el liberalismo progresista". El número dos de Ciutadans, maoísta de joven, zanja la polémica: "Cualquier evolución es legítima" y Rivera, cambiando el PP por Ciutadans, "ha avanzado ideológicamente".


Marc Andreu (El Periódico) (23/XI/06)
C´s#: ¡Oh!, ¡cielos!. Nos han descubierto..., ahora nos toca a nosotros... Queremos saber que tal fue la reunión con Zapatero el día 20 de Noviembre...dos días antes de la noticia de Albert y el PP...

1 comentarios:

Anónimo dijo...

talante, muchachos, talante