jueves, 10 de julio de 2008

La Reacción. Por Yauma

Como todo el mundo sabe la tercera ley del movimiento de Newton, ley de acción y reacción, dice que a cada acción se opone siempre una reacción igual y de sentido contrario. Esta ley de la mecánica newtoniana se expresa habitualmente en magnitudes vectoriales (módulo, dirección y sentido) por lo que a una fuerza o conjunto de fuerzas siempre se le opondrán otra fuerza o conjunto de fuerzas iguales en modulo y dirección pero de sentido contrario.

En términos sociales, políticos, amorosos, etc también existe el principio de acción y reacción, sólo que en estos casos suele darse una desproporción entre acción y reacción, y no resulta extraño encontrar noticias habituales en los medios de comunicación donde se dice que en tal o cual hecho la reacción de una de las partes en conflicto ha sido desproporcionada. En las sociedades democráticas, donde la tolerancia es un valor positivo, el concepto aparece frecuentemente ligado a determinadas reacciones policiales.

Pues bien, ante el manifiesto por la lengua común, infame manifiesto contra la nostra llengua, nosotros los patriotas cuatribarrados, tenemos la obligación de reaccionar con la serenidad y mesura que nos caracteriza, demostradas a lo largo de tantos siglos de dominio español, con firmeza y proporcionalidad siguiendo a nuestros lideres naturales y adaptando nuestros comportamientos a las declaraciones publicas de los mismos, por ello es bueno tener presente en todo momento, cual sura de obligado cumplimiento, las emanaciones verbales de estos grandes hombres:

El gran Honorable, llama a combatir sin miedo la falta de respeto a Catalunya, según ha declarado en su blog, curiosos tiempos que hasta los dioses necesitan un blog para comunicarse con los humanos, considera que la opinión pública española mantiene a todos los niveles una actitud hostil hacia Catalunya, dentro de una voluntad generalizada de marginarla “como país, como lengua, como cultura, como personalidad bien definida”. El ex presidente llama a combatir “Con decisión y confianza, sin miedo, y sin respeto para quien no nos respeta”.

El presidente actual, el iznajeño, a pesar de no ser de los nuestros, en este tema no se ha portado mal. Montilla denuncia que el manifiesto del castellano crea catalanofobia, “el presidente llama a combatir las actitudes que atentan contra la convivencia”. Como es el caso de la defensa del español, el presidente defiende con uñas y dientes la política lingüística de Catalunya “este no es un tema pequeño, no es un tema negociable”. Digo que no se ha portado mal porque él sabe que nosotros los patriotas cuatribarrados estamos orgullosos de estar creando, como es nuestra obligación, español- fobia en todo momento de nuestra patriótica existencia, y nos importa un rábano la convivencia con las huestes charnegas españolistas. Por otra parte no debemos perder de vista que la cabra siempre tira al monte, al monte de España, prueba de ello es el articulo que escribió el de Iznájar en La Vanguardia alegrándose de la victoria de la selección de ese país extranjero enemigo nuestro, al que evito nombrar tanto cuanto puedo.

Otro apoyo para nuestra tesis, recluir el idioma español en Catalunya al ámbito estrictamente privado, nos lo suministra nuestro aliado natural por conveniencia, el inefable y optimista patológico ZP, incapaz de percibir la realidad presente, nos proporciona oxigeno lingüístico y patriótico cuando afirma: “Estas otras lenguas, también españolas y por tanto patrimonio de todos, necesitan en paralelo una proyección y una protección. No tiene sentido pensar que el castellano debe defenderse de ellas. Los socialistas no pensamos que las lenguas cooficiales sean una mera anécdota, sino que su estímulo y su cuidado pasa por ser una de nuestras prioridades. Las lenguas de España están destinadas a unir y no separar. El lenguaje es el vehículo para el progreso”. Jo, jo, jo este angelito del Señor lo que no quiere es darse cuenta que nosotros no nos interesa el bilingüismo igualitario sino la imposición de la nostra llengua, por las buenas o por las malas, pues nuestra existencia como nación pueblo y Estado está en juego.

Con una lengua única podremos construir una Catalunya homogénea una “Catalunya catalana”. La Catalunya compleja, ambigua y plural de algunos debe amoldarse a nuestro sueño de pureza que en su origen existió, por esta razón nos duele en lo más profundo de nuestra alma leer escritos como el que reproducimos a continuación:

“Yo no soy una nacionalista española. Yo no soy castellanohablante, más bien lo hablo con un marcado acento catalán. Mis apellidos son de lo más catalán. Yo he nacido en Barcelona y me he educado en escuelas catalanistas postfranquistas. Y no tengo ningún resentimiento con mi lengua ni con mi tierra, pero sí lo tengo contra todos aquellos que han intentado hacer una versión única de la manera de ver, concebir y sentir tanto Catalunya como el catalán.

Para mí, mi identidad no se basa en la Moreneta, las sardanas, el seny y la rauxa, el humor inteligente e irónico iniciado por Mikimoto, ni en tener un Estatut, ni en un catalán con acento de Girona, ni en evitar cualquier palabra que se parezca al castellano, ni en el Barça més que un club, ni en el victimismo constante, ni en ignorar a los que crean cultura catalana que no sea en catalán, ni en dar por hecho que todo buen catalán ha de ser catalanista. Y aunque no lo crean, hay mucha, mucha gente que está harta pero pasa. Haces tu vida y vives. Pero cuando la manipulación se ve tanto, cuando en las noticias de la televisión pública describen la victoria de la selección española como si se tratara de la selección inglesa, cuando en el periódico hacen una crónica que parece que lo celebran cuatro gatos, y ya cuando lees artículos de opinión en los que se dice que con una selección catalana habría más celebración, o que si se apoya a la selección es porque hay jugadores catalanes, una se harta.

Se harta de la manipulación de los medios de comunicación catalanes en los que se han ido colocando todos los periodistas próximos a una manera de pensar, los demás se han quedado en el camino, y los que no piensan así tampoco se posicionan en contra, por no crear confrontación, o alejarse demasiado de la línea del medio. Porque es mentira, porque la gente en Catalunya está siguiendo a la selección, y nos reunimos en casas, todos los catalanets, para ver los partidos, y nos abrazamos y saltamos y gritamos, y pasamos de los pesados de Cuatro, y de su roja y su plaza. Nos importa un comino ellos y los catalanismos pesados. Somos catalanes, y en la actualidad vivimos en España, y no queremos plantearnos si somos o dejamos de ser. Queremos hablar catalán, también castellano, queremos convivir, y queremos divertirnos. ¡Señores es sólo fútbol! “ M.T. C. (La Vanguardia, cartas al Director)

Al inicio del escrito hemos hablado del principio de acción y reacción, en este contexto, la reacción patriótica ante la agresión españolista del manifiesto contra el catalán, será sumamente sutil pero efectiva. Sabido es que el espacio interceptado por el catalán y el castellano, las palabras comunes a uno y otro idioma, ocupan de diez al quince por ciento del total. Nuestros estudiosos, brillantes filólogos que necesariamente para la defensa de nuestra patria están en la actualidad ocupando importantes cargos políticos, asesorados por el eminente colaborador de este foro el prufesor “Nibey Se” especialista en barbarismos moros, formaran parte de un comité de sabios para llevar a cabo la depuración del catalán actual de toda contaminación castellana. Veamos algún ejemplo siguiendo el pequeño libro de sonetos de Òscar Samsó: “La tarda fuig i amb ella el dia” publicado en 1987 “ La tarde huye y con ella el día” aquí deben eliminarse como mínimo tres palabras, siguiendo cada soneto, con el diccionario de sinónimos en la mano se deberán sustituirse las palabras correspondientes causantes de la contaminación. En caso de no ser posible el cambio propuesto, se deberán inventar tantas palabras como fuere necesario, según el ejemplo bien documentado de la señora Aído. Claro que a medida que nos adentramos en el estupendo libro de O. S. la labor resulta más sencilla:
Avança amb els ulls clucs i vell i nou
trepitja, aixafa, en contra cap atot
per deturar-lo, ni diable a sou
amb rar conjur o embruixat xarbot.


¡Gracias Yauma!

Más de 600.000 mujeres fueron víctimas de la violencia machista en 2007 en España

Más de 600.000 mujeres fueron víctimas de la violencia machista el año pasado en España, de cuales el 21 por ciento presentó una denuncia contra su pareja o ex pareja, según el informe 'Obstinada realidad, derechos pendientes' de Amnistía Internacional (AI), realizado para evaluar los tres años de funcionamiento de la Ley contra la Violencia de Género.

De este más de medio millón de mujeres maltratadas, el 6,2 por ciento solicitó una orden de protección, que fue obtenida por el 4,6 por ciento. El informe refleja asimismo que el número de mujeres asesinadas por esta causa se ha ido incrementando en los tres últimos años, hasta alcanzar la cifra de 74 fallecidas en 2007, según datos del Consejo General del Poder Judicial.

A juicio de la responsable de Interior de AI, Virginia Álvarez, la ley "ha tenido poco impacto en aspectos fundamentales como la atención sanitaria, el acceso a recursos de atención integral, la asistencia letrada o la equidad territorial".

Así, denunció que los objetivos de esta norma en el ámbito sanitario "han quedado en el papel", ya que se debía "proporcionar formación a todos los profesionales del ámbito sanitario, cosa que no ha ocurrido".

Para Álvarez, la ley "no ha logrado garantizar la asistencia letrada especializada" a las maltratadas, el Gobierno no ha dado "un seguimiento exhaustivo" a la norma, "el presupuesto ha disminuido" y el número de policías dedicado a proteger a las víctimas "es escaso".

AUMENTAN LAS DENUNCIAS ARCHIVADAS

Por su parte, la autora del estudio, María Naredo, indicó que la implantación de los juzgados especializados en violencia sobre la mujer "no ha traído los resultados esperados", porque "la violencia habitual sigue quedando impune" y "la cifra denuncias archivadas se ha incremento".

"Otro aspecto que es motivo de preocupación es que el número de mujeres asesinadas con orden de protección en vigor ha ido aumentando en los últimos tres años: 5 en 2005, 8 en 2006 y 12 en 2007", apostilló.

Naredo acusó al Gobierno de "autocomplaciencia" y de no estar "dando la suficiente prioridad a esta tema", por lo que le exige "mayor autocrítica y que adopte medidas correctoras". Así, le pidió que destine más recursos, que realice mejores evaluaciones de la ley y que promueva la formación de los agentes implicados en los casos de violencia machista.

El informe también destaca que las mujeres extranjeras tienen seis veces más riesgo de ser asesinadas por su pareja que las españolas y reprocha que, "salvo en el País Vasco", la policía pueda incoar un expediente de expulsión a las inmigrantes maltratadas que se encuentran en situación irregular en España en el momento en que acuden a una comisaría a denunciar a su pareja, "lo que provoca un claro efecto disuasorio".

Europa Press

Si las leyes que tenemos no sirven habrá que cambiarlas YA

La Audiencia Nacional no ve delito en mantener el nombre de una calle a un etarra
El Pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, presidido por Javier Gómez, ha acordado, por unanimidad, que mantener el nombre de una calle a un terrorista no constituye una acción delictiva. Según los magistrados, "la apología de la apología no es delito". Argumentan que sólo es delito "un comportamiento activo" del alcalde del municipio correspondiente y no a través de la "mera omisión".
Libertad Digital

La Audiencia Nacional sostiene que mantener el nombre de una calle a un etarra no es delito
* El fallo dice que sólo se puede delinquir con 'un comportamiento activo' y no por 'omisión'
* La sentencia asegura que hacer 'apología de la apología' no es delito
El Mundo

La Audiencia falla que mantener calles con nombres de etarras no es delito
El pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional dictaminó ayer que el mantener calles con nombres de terroristas no constituye delito. El acuerdo, adoptado por unanimidad por los 17 magistrados de la Sala, recogió las tesis de su presidente, Javier Gómez Bermúdez, que considera, de acuerdo con el artículo 25 de la Constitución, que no puede ser castigada una conducta que no era delito en el momento de los hechos.
El País

La Audiencia no considera delito mantener calles dedicadas a etarras
La Sala de lo Penal zanja la controversia y concluye que el enaltecimiento del terrorismo no se puede cometer por omisión - La apología de la apología no es perseguible penalmente, dicen los magistrados
La Razón

La Audiencia Nacional permite que se mantenga el callejero etarra
No actuar, o lo que es lo mismo, mantener las calles con nombres de terroristas no constituye enaltecimiento del terrorismo, pues sólo se puede incurrir en este delito con un «comportamiento activo» y no por omisión. Por tanto, los alcaldes contra los que van dirigidas las diez querellas que se acumulan en la Audiencia Nacional (nueve relacionadas con ETA y una con Terra Lliure) no han cometido delito cuando se han negado o no han hecho nada por retirar las placas que aluden a los terroristas.
ABC

La Frase Progre. Por Pepiño Blanco

"[Se debe ser] capaz de mantener el gasto público en una situación de dificultad, porque no deben ser los ciudadanos quienes paguen las consecuencias"

Señores, vamos a celebrarlo. Que dice Pepiño que no vamos a ser "los ciudadanos" los que paguemos el gasto público. Eso significa que lo va a pagar el PSOE. O incluso que lo va a pagar Pepiño. Que alegría, oiga.

Solo hay una cosa que me cabree más que el hecho de que los políticos nos roben a los ciudadanos: que nos roben, y que además se rían de nosotros.

Porque ya me contará este insigne filósofo quien demonios paga las "prestaciones sociales" a los españoles. Y las subvenciones. Y a la enorme multitud de funcionarios y vividores del Estado, incluyendo a los burócratas como Pepiño. ¿De donde sale ese dinero?

Pues del bolsillo de los ciudadanos. Echad, echad un vistazo a vuestra nómina y vereis el palo que os da papá Estado cada mes. Y cuando vais a comprar, y os cobran el IVA. Y cuando vais a echar gasolina, y más del 50% del precio se lo llevan Zapatero y su tropa en impuestos.

Nos roban a manos llenos, con el único objetivo de comprar votos. No les importa otra cosa. Y ahora que la economía se cae, prometen seguir robando, al menos lo mismo, sino más. Pero eso sí, ese robo no lo "pagarán los ciudadanos". Y habrá muchos mentecatos en España que se lo creeran. Ellos se merecen tener a Zapatero en la Moncloa. El resto, los que no estamos contento de que nos metan la mano en el bolsillo, no nos lo merecemos. Pepiño, vete a paseo, anda.

La Frase Progre

La lengua, cuestión constitucional

LA defensa del castellano como lengua de todos los españoles y oficial de España trasciende los debates meramente jurídicos, educativos, históricos y territoriales que se están produciendo en torno al Manifiesto por la Lengua Común. Como han hecho ver la Mesa del Turismo -compuesta por las principales empresas del sector-, y ayer mismo también la CEOE, constituye asimismo una aportación a la economía española porque la progresiva supresión del castellano en las líneas aéreas, los carteles de las carreteras y las indicaciones en los aeropuertos, por ejemplo, perjudica la imagen de España ante el extranjero. Nuestro país pertenece a una comunidad de naciones, las europeas, perfectamente definidas por factores culturales e históricos, y entre ellos, con carácter principal, se halla el de la lengua común. Allí donde hay un multilingüismo agresivo y excluyente surgen la división y la pérdida de identidad nacional.

La denuncia de las empresas turísticas es un nuevo síntoma de la grave dinámica que está adquiriendo la postergación del castellano como consecuencia del desarrollo de políticas impositivas de la lengua cooficial, que vienen de la mano no sólo de grupos nacionalistas, sino también del socialismo allí donde gobierna en coalición con grupos separatistas, políticas de segregación que no están tan interesadas en la expansión de la lengua cooficial -cuya promoción y uso social enriquecen culturalmente al conjunto de España- como en extinguir progresivamente los elementos que integran la identidad española de sus habitantes. Para un ciudadano británico, alemán o francés, lo lógico es moverse por España, de norte a sur y de este a oeste, con el castellano como referencia para sus conversaciones y desplazamientos. La alternativa que proponen determinados gobiernos autonómicos con la imposición de la lengua cooficial es puro aldeanismo que no sólo choca con la naturaleza propia de las relaciones humanas -que tienden a simplificar sus instrumentos de comunicación-, sino también con la realidad lingüística de las sociedades que gobiernan. Quienes quieren imponer el vascuence, el gallego o el catalán no tienen un problema con las líneas aéreas, o con el Gobierno central, o con la Real Academia de la Lengua, sino con los ciudadanos vascos, gallegos o catalanes que usan libremente el castellano para hablar entre ellos, ver televisión o cine, oír la radio y leer periódicos.
Peor aún que la segregación lingüística que pretenden diversos gobiernos autonómicos es la inacción de las instituciones del Estado que deberían velar por los fundamentos del orden constitucional. Uno de éstos es la oficialidad del castellano como lengua de todos los españoles. Resulta preocupante que incluso el ministro del Interior, Alfredo Pérez-Rubalcaba, no tuviera una respuesta clara en el Consejo europeo a la pregunta de qué idioma habrán de estudiar los inmigrantes que lleguen a España. Si la solución es, como dijo, «hablar con las comunidades autónomas», difícilmente habrá solución, entre otras razones porque significa que el Gobierno español no tiene claro que a una política nacional, como la migratoria, le corresponde una respuesta nacional, en la que sólo cabe la lengua oficial del Estado.
Las dimensiones de la hostilidad hacia el castellano como lengua común tienen ya carácter constitucional. Son inadmisibles, desde el punto de vista de la Constitución, el sabotaje a la enseñanza del castellano en Cataluña, las amenazas a los comerciantes en el País Vasco o la inmersión lingüística que promueve el Gobierno gallego. Se trata de iniciativas inconstitucionales, más allá del significado jurídico de esta calificación, porque socavan uno de los pilares del principio nacional en el que se asienta el pacto constitucional de 1978, como es la oficialidad del castellano. No entenderlo así es rebajar la gravedad real del problema y reducirlo a los términos competenciales y victimistas en los que quieren mantenerse los nacionalismos y el socialismo filonacionalista que promueven este retorno al localismo medieval.

ABC - Opinión