sábado, 23 de diciembre de 2006

El Ayuntamiento de Barcelona torpedea que los jóvenes estudien una hora más de castellano

El Gobierno tripartito -PSC, ERC e ICV- y CiU aprueban una declaración institucional en contra

Barcelona - ¿Castellano o catalán? El debate lingüístico está de moda entre la clase política catalana. Las razones que han avivado la disputa son el giro catalanista de CiU para seducir a los votantes republicanos descontentos por el pacto con el PSC, la presencia de Ciutadans en el Parlament y el decreto del Gobierno para aumentar las clases en lengua castellana. El Parlament de Cataluña estrenó el primer pleno de esta legislatura con una disputa sobre el idioma y el Ayuntamiento de Barcelona se despidió ayer, en el último pleno antes de las vacaciones de Navidad, discutiendo más de lo mismo. CiU logró que los socios del gobierno tripartito -el PSC, ERC eICV- le apoyaran para tirar adelante una declaración institucional en contra de enseñar una hora más de castellano en Primaria. Resultado: el Ayuntamiento es la primera institución que rechaza el decreto del Gobierno de dar una tercera hora de castellano en las escuelas.

Pese a «haberse criado» en la misma casa, el grupo del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona no comparte la opinión del conseller de Educación, Ernest Maragall, sobre la realidad lingüística. Mientras Maragall se enfrentó con sus socios de ERC por defender que los niños necesitan esta tercera hora de castellano, los socialistas del Consistorio rechazaron de plano la propuesta.

Gracias al voto de los socialistas, el Ayuntamiento aprobó una declaración institucional que denuncia que el decreto supone «una invasión de las competencias educativas de la Generalitat». Añade que todos los estudios indican que el conocimiento que tienen los alumnos catalanes del castellano es «equiparable» a la de los estudiantes del resto de España. Asimismo, rechaza cualquier posibilidad de que el catalán padezca un retroceso en la escuela, algo que podría pasar si se impartiera una asignatura troncal en castellano. La declaración institucional pone de manifiesto también que el proceso de inmersión lingüística , avalado por el Tribunal Constitucional, «es la única garantía que permite que el catalán tenga el mismo grado de conocimiento por parte de todos los alumnos catalanes».

El PP fue el único grupo que votó en contra. El dirigente del PP, Alberto Fernández, denunció que esta polémica no se hubiera producido si en vez de poner una hora más de castellano se hubiera puesto una más de inglés. Fernández, que pronunció parte de su discurso en castellano, negó que el decreto sea una amenaza para el catalán. El popular hizo una lectura contraria a la del tripartito y CiU. Para él, el decreto del Gobierno es «un decreto de mínimos».

Con la aprobación de esta declaración Barcelona se convierte en el primer ayuntamiento en el que CiU tira en marcha la moción. Los de Artur Mas anunciaron el pasado viernes que todos los grupos de CiU en todos los ayuntamientos de Cataluña presentarían en sus respectivos plenos municipales una moción reclamando la derogación del Real decreto de enseñanzas mínimas en educación primaria, impulsado por el Gobierno.

Las razones que pusieron los grupos que apoyaron la declaración fueron las siguientes. La concejal socialista de Educación, Montserrat Ballarín, mostró su apoyo al modelo de inmersión lingüística de la enseñanza en Cataluña porque garantiza la cohesión social. Asimismo, defendió las competencias que otorga el Estatut a las instituciones catalanas y tachó el decreto de «intervencionista». Por su parte, el concejal de CiU, Jaume Ciurana, que fue el encargado de leer la declaración, advirtió de que ésta no es un acuerdo contra el reconocimiento del castellano, sino «a favor de una educación que garantiza el aprendizaje del catalán entre todos los alumnos de los colegios».

Montse Espanyol. La Razón.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Señores hay que empezar a marcar a los nazis. Estos hijos de puta son nazis.
¡¡A por ellos!!