sábado, 23 de febrero de 2008

El Peor

Articulo escrito por Alfonso Lazo en El Mundo de Andalucía el 22 de febrero de 2008

(Alfonso Lazo Díaz, nacido en Sevilla en 1936, profesor universitario que dio clases de historia a Alfonso Guerra, a Juan Carlos Rodríguez Ibarra y a muchos otros en la época del 68, es un socialista que perteneció al PSP de Tierno Galván. Fue diputado del PSOE en el Congreso (1977-1996), portavoz socialista en materia universitaria y presidente de la comisión del Defensor del Pueblo. Actualmente no ejerce labor política ni docente. Pero sí ha querido denunciar que Zapatero es el peor presidente de la democracia española desde 1977.)


EL PEOR


José Luis Rodríguez Zapatero es el peor gobernante habido en España desde que murió Franco; el único capaz de colocar como objetivo de su política la ruptura entre los españoles: No se trata de una afirmación ociosa. El susurro de ZP reconociendo junto a un periodista áulico que necesita aumentar las tensiones del país y llegar si el preciso al drama, viene a ser el acta notarial que reconoce lo que todos ya sabíamos de manera un poco intuitiva: para mantener el poder , el señor Z, necesita mantener el voto de los radicales, los progres, las mentalidades adolescentes, los iluminados, los castristas, los okupas, los jipis viejos anclados en 1968, gente toda ella abstencionista confesa salvo caso de odios desatados y grave rompimiento social. Explicada queda su confrontación con la Iglesia y con las víctimas del terrorismo. Y explicado queda el guerra civilismo y el cuidadoso diseño de la Media Memoria Histórica. Los españoles vivían reconciliados hasta que desde el poder se reabrieron las viejas heridas de la contienda; una acción maligna destinada a destruir los esfuerzos pacificadores de Adolfo Suárez, y Felipe González. Gran descomponedor, ZP incluso llega a poner en peligro el concepto mismo de Justicia de un Estado de Derecho cuando detiene o pone en libertad, según intereses electorales, a los asesinos de ETA. Personaje tal no merece un solo voto. Que pierda las elecciones pasa a ser un asunto de salud pública.

No es posible aventurar en estos momentos quien ganara el 9 de marzo; pero es seguro que si gana el PSOE ganará por menos escaños que los que ahora disfruta. Una situación, en efecto, dramática, según la terminología acuñada por el presidente, porque el Gobierno va a quedar todavía más indefenso ante los chantajes nacionalistas de catalanes y vascos. Acaba de recordarlo el portavoz de Ezquerra Republicana: “Si Zapatero vuelve a la Moncloa, cobraremos por adelantado nuestro apoyo”. Un cobro en plena crisis económica que ZP activa con sus promesas electorales de tirar la casa por la ventana.

De modo que quizá sean las elecciones más importantes celebradas en España desde el comienzo de la democracia. Felipe González, Suárez, Carrillo, Guerra, Almunia, Aznar, con errores y aciertos fueron políticos maduros y tenían sentido del Estado. Zapatero, no: astuto, sin auctoritas, temido dentro del PSOE, aunque no respetado, ignorante de la Historia de España, es rehén de los nacionalismos hasta el punto de modificar bajo cuerda la Constitución a golpes de concesiones. Como podemos recomponer una situación así.

Cabe primero el voto útil: la marcha del señor Z, únicamente se hace posible caso de ganar Rajoy. Es el sufragio realista: votar al PP como único camino para que Zapatero lo recorra de vuelta a casa; muchos buenos militantes socialistas, horrorizados con la deriva reaccionaria del PSOE en busca de apoyos entre el tribalsimo prehistórico, lo agradecerían silenciosos. No obstante, a los viejos y convencidos socialdemócratas puede resultarles duro escoger de pronto la papeleta con las siglas del PP. Para ellos se abre el voto ideal.

Es el voto al partido contra el que la prensa áulica ha decretados silencio porque muerde los sufragios del PSOE. El partido de Rosa Díaz, de Fernando Sabater, del Álvaro Pombo, de Antonio Muñoz Molina, del historiador Elorza, del escultor Ibarrola. Ningún otro puede ofrecer un friso semejante de intelectuales prestigiosos; nada mas alejado de los mediocres artistas de subvenciones millonarias que cantan las cejas de ZP.

Y queda por último el dignísimo voto en blanco de sobre vacío, tan democrático y tan irritante para los políticos apoltronados. En todo caso, al final, cualquier decisión es buena si termina restando papeletas de las urnas al peor de los candidatos.

Publicado en El Mundo (Edición Andalucía)

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Leguina, Lazo... parece que va emergiendo algo de rebeldía entre los socialistas históricos. Seguramente se dan cuenta de que nos jugamos la democracia si ZP vuelve a salir elegido y consuma las políticas desvertebradoras iniciadas en esta legislatura, apoyado en aliados nacionalistas y la IU de Llamazares, Madrazo y demás genios políticos.
Nosotros deberíamos reactivar el movimiento ciudadano a fin de presionar a Rajoy a que no pacte con los nacionalismos y a la opinión pública para que vote al PP o a UPyD, a Rosa 10.