Albert Rivera ha sido elegido presidente de Ciutadans-Partido de la Ciutadania en el congreso que la formación celebra en L'Hospitalet de Llobregat. La posición de Rivera se ha afianzado además en la ejecutiva, ya que la corriente oficialista que él preside ha conseguido las 20 plazas que estaban en disputa.
A pesar del claro éxito de Rivera, el congreso no ha sido una balsa de aceite. A las nueve de la noche, aún no se había votado el consejo general, el máximo órgano de dirección política entre congresos, porque se ha tenido que contar dos veces los votos de la lista de la ejecutiva.
Este retraso ha hecho que muchos de los asistentes marcharan, por lo que la corriente crítica de Rivera se plantea anular la votación del consejo general.
Miembros del sector crítico tienen previsto reunirse esta misma noche para plantear su salida del partido.
Rechazo de las listas cerradas
Por la mañana, el plenario del congreso ha revocado la decisión adoptada ayer por la ponencia de estatutos de elegir la comisión ejecutiva por medio de listas cerradas, fórmula defendida por Rivera.
El resultado de la votación, con 233 delegados a favor de las listas abiertas, 196 en contra y 19 abstenciones, se ajustaba a los deseos del sector crítico encabezado por Luis Bouza-Brey, que había llegado a plantearse la retirada de su candidatura en el caso de que se aprobarán las listas cerradas.
La intensidad de los debates en el pleno de la asamblea de Ciutadans y de las negociaciones que se llevan a cabo entre miembros de los distintos sectores han hecho que se retrase la clausura del congreso, prevista inicialmente para las cinco de la tarde.
El rechazo a las listas cerradas, fórmula que obligaba a los delegados a escoger a todos los componentes de una lista, había abierto una pequeña esperanza de acuerdo entre el sector oficialista y el sector crítico, que siempre ha propugnado que los congresistas pudieran elegir nombres de las distintas candidaturas para formar la nueva ejecutiva.
Sin embargo, la definición del partido como de "centro-izquierda no nacionalista", inspirada por Francesc de Carreras y aprobada ayer en la ponencia, sigue provocando el rechazo de los críticos, partidarios de incluir el término liberal para sintonizar con un espectro más amplio del espacio político.
Las relaciones con ¡Basta Ya!, claves en el futuro de Ciutadans
Antes del congreso los críticos advirtieron de que si las conclusiones del congreso no les satisfacían, optarían por sumarse al proyecto de partido promovido desde sectores de ¡Basta Ya! y constituirían la federación catalana de esta nueva formación.
Aunque los críticos no han jugado fuerte esta baza, en los distintos sectores de Ciutadans se es consciente de que las relaciones del grupo vasco con Rivera son manifiestamente mejorables. Algunos miembros de la plataforma vasca han expresado su decepción con los planteamientos que el presidente de Ciutadans hizo en una entrevista que mantuvieron recientemente.
En cambio, tanto Fernando Savater como Rosa Díez, la aún eurodiputada del PSOE, aunque probablemente integrante del nuevo partido, mantienen una relación muy estrecha y cordial con algunos de los fundadores de Ciutadans (Arcadi Espada, Albert Boadella y Xavier Pericay) que, sin militar en el partido, respaldan plenamente al sector crítico.
Josep Tordera, El Periódico, 01-07-2007
A pesar del claro éxito de Rivera, el congreso no ha sido una balsa de aceite. A las nueve de la noche, aún no se había votado el consejo general, el máximo órgano de dirección política entre congresos, porque se ha tenido que contar dos veces los votos de la lista de la ejecutiva.
Este retraso ha hecho que muchos de los asistentes marcharan, por lo que la corriente crítica de Rivera se plantea anular la votación del consejo general.
Miembros del sector crítico tienen previsto reunirse esta misma noche para plantear su salida del partido.
Rechazo de las listas cerradas
Por la mañana, el plenario del congreso ha revocado la decisión adoptada ayer por la ponencia de estatutos de elegir la comisión ejecutiva por medio de listas cerradas, fórmula defendida por Rivera.
El resultado de la votación, con 233 delegados a favor de las listas abiertas, 196 en contra y 19 abstenciones, se ajustaba a los deseos del sector crítico encabezado por Luis Bouza-Brey, que había llegado a plantearse la retirada de su candidatura en el caso de que se aprobarán las listas cerradas.
La intensidad de los debates en el pleno de la asamblea de Ciutadans y de las negociaciones que se llevan a cabo entre miembros de los distintos sectores han hecho que se retrase la clausura del congreso, prevista inicialmente para las cinco de la tarde.
El rechazo a las listas cerradas, fórmula que obligaba a los delegados a escoger a todos los componentes de una lista, había abierto una pequeña esperanza de acuerdo entre el sector oficialista y el sector crítico, que siempre ha propugnado que los congresistas pudieran elegir nombres de las distintas candidaturas para formar la nueva ejecutiva.
Sin embargo, la definición del partido como de "centro-izquierda no nacionalista", inspirada por Francesc de Carreras y aprobada ayer en la ponencia, sigue provocando el rechazo de los críticos, partidarios de incluir el término liberal para sintonizar con un espectro más amplio del espacio político.
Las relaciones con ¡Basta Ya!, claves en el futuro de Ciutadans
Antes del congreso los críticos advirtieron de que si las conclusiones del congreso no les satisfacían, optarían por sumarse al proyecto de partido promovido desde sectores de ¡Basta Ya! y constituirían la federación catalana de esta nueva formación.
Aunque los críticos no han jugado fuerte esta baza, en los distintos sectores de Ciutadans se es consciente de que las relaciones del grupo vasco con Rivera son manifiestamente mejorables. Algunos miembros de la plataforma vasca han expresado su decepción con los planteamientos que el presidente de Ciutadans hizo en una entrevista que mantuvieron recientemente.
En cambio, tanto Fernando Savater como Rosa Díez, la aún eurodiputada del PSOE, aunque probablemente integrante del nuevo partido, mantienen una relación muy estrecha y cordial con algunos de los fundadores de Ciutadans (Arcadi Espada, Albert Boadella y Xavier Pericay) que, sin militar en el partido, respaldan plenamente al sector crítico.
Josep Tordera, El Periódico, 01-07-2007
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