viernes, 25 de septiembre de 2009

La prensa francesa le mueve a ZP su silla prestada en el G-20 Por Luis Balcarce,


¿Qué pinta Zapatero en el G-20? Los índices económicos que acompañan al líder planetario a Pittsburg no le servirán para presumir de mucho: según la Unión europea, el retroceso del PIB podría llegar este año al 3,7%. Y el índice de paro, actualmente en un 17,9% podría rebasar el 20% en 2010. España será el último país europeo que saldrá del pozo debido a su debilidad productiva. La prensa francesa certifica que esta crisis le queda muy grande.

La prensa francesa le tiene tomada la matrícula a Zapatero. El desastre de nuestra economía no deja indiferente a nadie y hasta Liberátion>se atreve a moverle la silla prestada en el G-20 a ZP: "[Zapatero] parece ceder ante la improvisación, especialmente en materia fiscal. En lo que se refiere a la anunciada subida de impuestos, la confusión es total. Un día Zapatero habla de la subida del IVA, de los impuestos sobre el alcohol y el tabaco. Al día siguiente, habla de gravar las rentas del capital y no las del trabajo y, para complicar más las cosas, tres ministros de peso han dejado su cargo".

A nadie se le escapa que ZP llega a Pittsburg con la popularidad por el piso. Le Monde hablaba ayer de sus días "más difíciles desde que llegó al poder en España la primavera de 2004. No solamente su gobierno se ha enfrentado a la recesión más violenta de toda la Unión Europea, hasta el punto de que ningún experto internacional se arriesga a pronosticar cuándo saldrá, sino que el jefe del ejecutivo español, cuya popularidad está en caída libre, ha caído bajo el fuego cruzado de críticas políticas".

Tiene razón Román Cendoya cuando llama 'pagafantas' a ZP.> "¿Por qué le invitan?", se pregunta el articulista de El Imparcial. "Porque es el primo que teniendo una tasa de paro desconocida en toda la UE sigue diciendo que estamos mejor que nadie y además contribuye con el dinero que no tiene a pagar la ronda. Demostraría “fortaleza ante las poderosos” si dijera no a seguir pagando".

Felpudo de Obama en Afganistán y de los sátrapas bolivarianos en Latinoamérica, nuestro presidente no pinta nada en una reunión que, como ya viene siendo habitual, servirá para que los líderes mundiales escondan la basura por debajo de la alfombra mientras se sacan la foto y aburren al personal con discursos celestiales.

Que nadie espere milagros. Un ejemplo de la inutilidad de estas reuniones es que en el G-20 no se abordan cuestiones monetarias, cruciales para salir de la crisis y sólo reservadas a los miembros del G-7.

Lo cierto es que las críticas ya le empezaron a caer antes de su viaje al conocerse que llevará a su familia de polizonte en el Airbus oficial.> ¿La razón? Marketing político: imitar el perfil familiar de Obama. Zapatero nunca da puntada sin hilo.



Periodista Digital