jueves, 9 de abril de 2009

Rechazada la ley francesa antipiratería

Europa Press: Francia tumba por sorpresa la ley 'antiP2P'

El Parlamento francés ha rechazado, contra todo pronóstico, dar luz verde a la controvertida ley para luchar contra la piratería en Internet tras el voto a mano alzada de los diputados de la Asamblea nacional. La medida preveía desconectar, después de tres avisos, a los usuarios que usaran redes P2P para compartir contenidos ilícitos.

El texto, que había sido previamente aprobado en el Senado, fue rechazado en la Cámara baja por 21 votos frente a 15 debido a la ausencia en el hemiciclo de varios diputados de la mayoría gubernamental, la UMP.


El inesperado resultado de la votación provocó que los parlamentarios de izquierda, contrarios a la norma, se levantaran para aplaudir. El tropiezo en la Asamblea obligará al Gobierno a presentar de nuevo el proyecto aunque el Ejecutivo cree que este hecho sólo retrasará la aprobación unas semanas.

El polémico proyecto de ley sobre la defensa de los derechos de autor en Internet pretende luchar contra las descargas ilegales y contempla la desconexión de los piratas de la Red durante un periodo que puede ir de los dos meses a un año.

En esencia, el texto impulsado por el Gobierno crea una Alta Autoridad para la difusión de obras y protección de los derechos en Internet (Hadopi, según sus siglas en francés) que será la encargada de aplicar una "respuesta gradual" a los internautas que realicen descargas ilegales.

El infractor recibirá primero un correo electrónico, luego un segundo correo acompañado de una carta certificada y, en caso de reincidir, una comisión integrada por tres jueces podrá ordenar que se le corte su acceso a internet durante un periodo de entre dos y doce meses.

El 'pirata' tendrá la posibilidad de negociar que la suspensión se limite a entre uno y tres meses, pero para que no esquive la sanción simplemente cambiando de compañía el texto contempla la creación de un listado de abonados dados de baja por este motivo.

El dispositivo que crea la Hadopi es el que ha generado un mayor debate durante el proceso legislativo de la ley y todavía ayer la comisión mixta paritaria (CMP), formada por siete senadores y diputados mayoritariamente de la UMP, endureció el texto al aprobar una enmienda que obliga al internauta a seguir pagando su abono al proveedor durante el periodo que dure la sanción.

En primera lectura los comunistas se abstuvieron y los socialistas votaron a favor pero el grupo socialista mostró luego su oposición y anunció que recurriría la ley ante el Consejo constitucional basándose en la falta de conformidad con el derecho europeo.

El proyecto gubernamental, negociado con representantes de productores y distribuidores, pretende proteger los derechos de autor al crear un marco jurídico adaptado al desarrollo de la Red, principio que nadie cuestiona.

Pero durante el debate parlamentario han surgido dudas sobre su eficacia y el temor de que, al final, se apruebe un texto que no esté a la altura de los nuevos tiempos que impone la cultura en Internet.

La ministra gala de Cultura, Christine Albanel, rechaza las críticas y las acusaciones lanzadas desde la oposición, que habla de un texto que atenta contra las libertades.

DENEUVE Y VICTORIA ABRIL SE DESMARCAN

Por otro lado, aunque la mayoría de los artistas e intérpretes apoya la normativa impulsada por Albanel, un grupo de ellos entre los que se encuentran las actrices Catherine Deneuve, Victoria Abril o Chiara Mastroianni, se ha desmarcado al considerarla "demagógica, técnicamente inaplicable, ignorante de los nuevos procesos de descarga y puramente represiva".

"La ley Creación e Internet no se dirige ni al cine en su diversidad ni a los espectadores. Al ser tan sólo un último y vano intento de erradicar la piratería mediante la sanción, sin preocuparse de crear una oferta de descarga legal, accesible y abierta en Internet, no responde a ninguno de los desafíos que plantean hoy las nuevas tecnologías", señalan los artistas críticos en una tribuna publicada el pasado 7 de abril en 'Libération'.


El Mundo: Los franceses seguirán disfrutando de Internet, aunque 'pirateen'

Por primera vez en 26 años una ley aprobada en comisión mixta ha sido rechazada por el Parlamento. Contra todo pronóstico y por sorpresa total, la Asamblea francesa ha rechazado la ley 'Creación e Internet' para luchar contra la piratería en Internet, que contemplaba la suspensión hasta un año de la conexión a la Red de los usuarios reincidentes en la descarga ilegal de contenidos audiovisuales.

El exceso de confianza en que la medida saldría adelante era tal que, en el momento de la votación, los diputados conservadores eran minoritarios en el hemiciclo y eso permitió a los de la oposición socialista –que en cambio habían acudido en masa a la sesión- imponer su voto negativo. El resultado fue de 21 votos a favor y 15 en contra.

El Gobierno podrá volver a presentar el proyecto, según la legislación francesa y de hecho lo hará "a la vuelta de las vacaciones parlamentarias de Pascua", según el secretario de Estado para las Relaciones con el Parlamento, Roger Karoutchi.

En todo caso, sus detractores han logrado ya un triunfo inapelable: dar jaque mate a la "doble sanción" (que proponía como castigo contra la piratería, tras un primer aviso, cortar al usuasrio el acceso a la red). Según la legislación francesa, la versión del proyecto de ley que el Gobierno podrá someter nuevamente a la aprobación del Parlamento no es la aprobada por la comisión mixta, sino la primera que se presentó, en la cual no se contemplaba dicha medida.

Un trámite formal, en teoría

Debía de ser sólo una formalidad la aprobación de la llamada ley Hadopi debido a la creación de una nueva autoridad administrativa independiente que controlará e impedirá las posibles descargas ilegales por Internet realizadas por los usuarios (Alta Autoridad para la Difusión de Obras y la Protección de Derechos en Internet).

Con ese voto, en teoría simplemente formal, Francia iba a convertirse en pionera a nivel mundial de las medidas para luchar contra la piratería en la red, pues iba a ser el primer país en adoptar una ley de respuesta a las descargas ilegales y que, de hecho, controlaba el acceso y uso de Internet, suscitando así un duro debate entre partidarios y detractores. El texto ya había sido aprobado el martes pasado en una comisión mixta paritaria. Además, esta misma mañana, el Senado también lo había ratificado. Sólo faltaba el voto de los diputados para que el texto propuesto por el gobierno conservador se convirtiese en realidad. Debido a la imprevista ausencia de diputados conservadores, la Hadopi fue rechazada por 21 votos en contra y 15 a favor. Entre los votos en contra se encontraban también los de dos diputados de la mayoría parlamentaria del presidente conservador Nicolas Sarkozy. Y es que tras la aprobación del Senado, segura como estaba del triunfo, la mayoría había dejado libertad de voto a sus diputados.

El contenido

Sin embargo, los conservadores no concedieron la importancia necesaria a las numerosas críticas que en sus propias filas produjo la versión de la ley aprobada hace dos días, que recogió un endurecimiento de las sanciones contra los usuarios de Internet que descarguen ilegalmente material en la red. En un primer momento, la Hadopi sólo preveía la suspensión de la conexión Internet por un período de entre dos meses a un año a aquellos que realicen descargas ilegales.

Sin embargo, en la versión aprobada por la comisión mixta paritaria se introdujo una 'doble sanción' que preveía que el usuario sancionado con el corte de su conexión tendría que seguir pagando su abono Internet aunque ya no lo pudiera utilizar. Este principio, en cambio, había sido suprimido en el primer examen del proyecto de ley por la Asamblea, a principios de marzo.

Pese a que el rechazo parlamentario no significa el final de la Hadopi, pues según la legislación francesa, cuando un texto ha sido aprobado en comisión mixta y luego es rechazado por una de las Cámaras, el Gobierno puede volverlo a presentar.

El inesperado golpe de efecto ha desencadenado la reacción inmediata de vencidos y vencedores.

Reacción de los conservadores

Uno de los más duros fue el secretario de Estado para las Relaciones con el Parlamento, Roger Karoutchi, que denunció un "acto de piratería" por parte de la izquierda. Y es que según Karoutchi, la izquierda habría "enmascarado la presencia de sus diputados en el edificio, haciéndolos entrar en el hemiciclo una vez que se había llamado a votar y desnaturalizando así la realidad del debate y la votación".

Por su parte, el relator del proyecto de ley, Franck Riester, diputado de la Unión por un Movimiento Popular (UMP), el partido de Sarkozy, también dio rienda suelta a su enfado y afirmó que, "de nuevo una vez más, por una maniobra política, los diputados socialistas han llegado en el momento del voto para pronunciarse en contra. Creo que esto no es digno de un buen funcionamiento del Parlamento".

La mayoría conservadora considera lo sucedido como una trampa de la oposición, pues es muy raro que un texto sea rechazado tras haber sido aprobado por la comisión mixta paritaria.

Por el contrario, el rechazo de la Hadopi es "una inmensa alegría", según afirmó el diputado socialista Patrick Bloche, mientras que Jeremy Zimmerman, líder del movimiento 'Quadrature du Net', contrario a la ley, lo consideró "una formidable victoria de los ciudadanos". "Este voto prueba que aún es posible hacerse oir. Es un fantástico ejemplo del uso de Internet para contrarrestar a quienes tratan de controlarla. Las libertades individuales no han sido sacrificadas para tratar de preservar los intereses corporativistas de unas pocas industrias obsoletas", añadió.

Según el portavoz de los diputados socialistas, Jean-Marc Ayrault, el Gobierno debe "tomar nota de este voto" y "renunciar definitivamente a ese proyecto" de ley. Algo que, sin embargo, el ejecutivo no está dispuesto a hacer.


El País: Rechazada por sorpresa la ley francesa antipiratería que preveía cortes en Internet

El Parlamento francés ha rechazado hoy contra todo pronóstico un proyecto de ley del Gobierno conservador de Nicolas Sarkozy para defender los derechos de autor, según informan los diarios galos. La norma iba a permitir la suspensión de hasta un año de la conexión a Internet de usuarios reincidentes en la descarga ilegal de contenidos audiovisuales.

La mayoría de los diputados de la Asamblea, a mano alzada, ha rechazo el proyecto, que previamente había sido aprobado (y endurecido) por el Senado. La ausencia de numerosos representantes y el hecho de que dos diputados de la mayoritaria UMP (el partido de Sarkozy) hayan votado en contra junto a la izquierda, ha inclinado la balanza: 15 votos a favor, frente a 21 en contra. El resultado ha sido recibido por los diputados de la izquierda puestos en pie entre aplausos.

Los dos diputados que han roto la disciplina de partido lo han hecho, previsiblemente, por el endurecimiento que el Senado introdujo en la norma, con la figura del doble castigo: los internautas reincidentes en la descarga ilegal no solo verían cortado su acceso a Internet por un plazo de hasta un año, sino que también deberían seguir abonando la cuota de conexión todo ese tiempo.

El Ejecutivo podrá pedir que se vuelva a votar la ley en "algunas semanas", explicó a la emisora France Info el secretario de Estado de Relaciones con el Parlamento, Roger Karoutchi. Cuando es rechazado un texto legal que proviene de una comisión mixta paritaria (como es el caso), el Gobierno puede decidir que se realice una nueva votación, aunque el texto debe entonces volver a pasar por las dos cámaras (Senado y Asamblea).

Cómo funciona la norma

Si la ley acaba entrando en vigor tal y como está redactada ahora, los internautas que realicen descargas ilegales de manera continuada recibirán un correo electrónico de aviso de la Alta Autoridad Para la Difusión de Obras y la Protección de Derechos en Internet (Hadopi, en sus siglas en francés), un organismo creado específicamente para aplicar la ley.

Si el usuario continuase con las descargas ilegales, a los seis meses recibirá una carta certificada como segundo aviso. Según el diario Le Parisien, la norma cuenta con un presupuesto capaz de enviar 3.000 cartas certificadas y 10.000 mensajes electrónicos al día y podrá sancionar, también al día, a 1.000 internautas.

La izquierda, que considera la norma ilegal, tenía previsto enviar el texto de la ley al Consejo Constitucional. Los socialistas galos creen que solo un juez puede cortar el acceso de un ciudadano a Internet. También empresas de telecomunicaciones y operadores, se han mostrado contrarios a la ley. Sin embargo, profesionales del mundo de la cultura, cantantes y cineastas, apoyan la norma.


Libertad Digital: Rechazada por sorpresa la Ley Sarkozy de los tres avisos

Por la ausencia de varios diputados

Después de ser aprobada por la Asamblea Nacional por 12 votos contra 4, a la Ley Sarkozy que proponía desconectar de internet a los usuarios de P2P ha sido rechazada en la última votación, que se esperaba que fuera un mero trámite.

El pasado jueves, el polémico proyecto de ley sobre la "protección de la creación en internet" fue aprobado con la presencia de sólo dieciséis diputados en la Asamblea Nacional. Estaba previsto que, al igual que sucede con otras leyes, la votación no se realizara al finalizar el debate sino la semana siguiente, pero el Gobierno de Sarkozy exigió que el voto se realizara al finalizar el debate.


La ley debía pasar por el Senado antes de ser finalmente aprobada, y esta Cámara la endureció obligando al usuario sancionado con la desconexión por descargarse material protegido por derechos de autor (cine, música, series de televisión...) a pagar religiosamente su conexión durante el tiempo en que estuviera castigado, que era lo que reclamaban las operadas.

Así, el proyecto volvió a la Asamblea Nacional para recibir el sí definitivo. Pero el Parlamento estaba también vacío, aunque no tanto: sólo votaron 36 de los 577 diputados que componen la cámara. En esta ocasión el resultado fue de 15 votos a favor frente a 21 en contra, incluyendo en estos dos últimos a dos diputados de la UMP, el partido de Sarkozy, que se cree que cambiaron su voto debido a la decisión del Senado de aumentar el castigo a los internautas. El rechazo por sorpresa del texto fue aplaudido desde los escaños de izquierda.

No obstante, esto no significa que el proyecto de ley vaya a quedar paralizado. Según informa El País, cuando se rechaza un proyecto de ley proveniente de una comisión mixta paritaria, como ha sido el caso, el Gobierno puede decidir que se realice una nueva votación dentro de unas semanas.

La polémica ley antipiratería de Sarkozy

La ley prevé la creación de la Alta Autoridad de Protección de Derechos sobre Internet (Hadopi), que será la encargada de dar los avisos a los internautas que pirateen archivos y la que dictamine la interrupción de las conexiones para los reincidentes, según informa EFE.

El proyecto especificaba que el primer aviso se haría por correo electrónico y sería seguido por otro que se enviará por carta certificada en caso de que el usuario reincidiera en algún momento de los siguientes seis meses.

Si en el periodo de un año desde el primer aviso el internauta vuelva a usar redes P2P, se procedería a desconectarle de internet. El tiempo que dure la sanción variará entre dos meses y un año, en función de la cantidad de descargas que haya realizado el usuario.

Las decisiones de este nuevo organismo no podrían ser recurridas por los internautas sancionados, a no ser que hubieran aceptado con anterioridad instalar en su ordenador un programa espía que informe a Hadopi del material que comparte un usuario.

Las estimaciones del Ministerio de Cultura francés prevén que Hadopi enviará cada día 10.000 correos electrónicos de aviso, 3.000 cartas certificadas y 1.000 desconexiones, lo que significa que el 20 por ciento de los franceses podría recibir un aviso del nuevo organismo.

En España, el Gobierno no ha adoptado ninguna medida en esta dirección, aunque no la descarta. Las entidades de gestión de derechos de autor y las operadoras están negociando un acuerdo que, sin llegar a la desconexión, castigue a los usuarios de P2P, y el nombramiento de González-Sinde podría acelerar el desenlace.


ABC: Rechazada en Francia la controvertida ley antipiratería

El texto pretende luchar contra las descargas ilegales y contempla la desconexión de los piratas de la Red durante un periodo que puede ir de los dos meses al año

El Parlamento francés ha rechazado, contra todo pronóstico, dar luz verde a la controvertida ley para luchar contra la piratería en Internet tras el voto a mano alzada de los diputados de la Asamblea nacional. El texto, que había sido previamente aprobado en el Senado, fue rechazado en la Cámara baja por 21 votos frente a 15 debido a la ausencia en el hemiciclo de varios diputados de la mayoría gubernamental, la UMP.


El inesperado resultado de la votación ha provocado que los parlamentarios de izquierda, contrarios a la norma, se levantaran para aplaudir. El tropiezo en la Asamblea obligará al Gobierno a presentar de nuevo el proyecto aunque el Ejecutivo cree que este hecho sólo retrasará la aprobación unas semanas.

El polémico proyecto de ley sobre la defensa de los derechos de autor en Internet pretende luchar contra las descargas ilegales y contempla la desconexión de los piratas de la Red durante un periodo que puede ir de los dos meses a un año.

Protección de derechos en Internet

En esencia, el texto impulsado por el Gobierno crea una Alta Autoridad para la difusión de obras y protección de los derechos en Internet (Hadopi, según sus siglas en francés) que será la encargada de aplicar una "respuesta gradual" a los internautas que realicen descargas ilegales. El infractor recibirá primero un correo electrónico, luego un segundo correo acompañado de una carta certificada y, en caso de reincidir, una comisión integrada por tres jueces podrá ordenar que se le corte su acceso a internet durante un periodo de entre dos y doce meses.

El 'pirata' tendrá la posibilidad de negociar que la suspensión se limite a entre uno y tres meses, pero para que no esquive la sanción simplemente cambiando de compañía el texto contempla la creación de un listado de abonados dados de baja por este motivo.

El dispositivo que crea la Hadopi es el que ha generado un mayor debate durante el proceso legislativo de la ley y todavía ayer la comisión mixta paritaria (CMP), formada por siete senadores y diputados mayoritariamente de la UMP, endureció el texto al aprobar una enmienda que obliga al internauta a seguir pagando su abono al proveedor durante el periodo que dure la sanción.

Dudas sobre su eficacia

En primera lectura los comunistas se abstuvieron y los socialistas votaron a favor pero el grupo socialista mostró luego su oposición y anunció que recurriría la ley ante el Consejo constitucional basándose en la falta de conformidad con el derecho europeo. El proyecto gubernamental, negociado con representantes de productores y distribuidores, pretende proteger los derechos de autor al crear un marco jurídico adaptado al desarrollo de la Red, principio que nadie cuestiona. Pero durante el debate parlamentario han surgido dudas sobre su eficacia y el temor de que, al final, se apruebe un texto que no esté a la altura de los nuevos tiempos que impone la cultura en Internet.

La ministra gala de Cultura, Christine Albanel, rechaza las críticas y las acusaciones lanzadas desde la oposición, que habla de un texto que atenta contra las libertades. Por otro lado, aunque la mayoría de los artistas e intérpretes apoya la normativa, un grupo de ellos entre los que se encuentran las actrices Catherine Deneuve, Victoria Abril o Chiara Mastroianni, se ha desmarcado al considerarla "demagógica, técnicamente inaplicable, ignorante de los nuevos procesos de descarga y puramente represiva".

"La ley Creación e Internet no se dirige ni al cine en su diversidad ni a los espectadores. Al ser tan sólo un último y vano intento de erradicar la piratería mediante la sanción, sin preocuparse de crear una oferta de descarga legal, accesible y abierta en Internet, no responde a ninguno de los desafíos que plantean hoy las nuevas tecnologías", señalan los artistas críticos en una tribuna publicada el pasado 7 de abril en 'Libération'.

Pepiño Blanco cierra su blog

Lo echaremos en falta, porque nos ha dado grandes tardes de gloria y muchas risas. Aunque Pepiño Blanco desvincula la decisión de su nuevo cargo como ministro de Fomento, las fechas coinciden y el socialista asegura que lo retomará en cuanto pueda. ¿Será cierto?

El nuevo ministro de Fomento y vicesecretario general del PSOE, José Blanco, ha cerrado su blog en Internet aunque se compromete a volver a "colgar" sus comentarios "lo antes posible".


En su mensaje de despedida en el blog, Blanco desvincula la decisión de cerrarlo a su nombramiento como ministro de Fomento y explica que se trata de una decisión tomada a finales del año pasado.

"A finales del año pasado, un grupo de amigos me insistió en que debía cambiar el formato de este cuaderno. Reconozco que lo estuve dando vueltas las pasadas Navidades pero os confieso que me costaba tomar la decisión porque había cogido cariño a este mi primer cuaderno y parecía que si lo cerraba, perdía con el todas las complicidades que hemos trenzado en este tiempo. Pero llegué a la conclusión de que había que dar el paso, como algunos de vosotros también me habías indicado de forma sutil a veces y expresa otras", escribe Blanco.

"Quizás el formato ya estaba agotado hace tiempo y yo he ido escribiendo en los márgenes y hasta en las tapas. Pero todo llega. Decidí cambiarlo y me di de plazo hasta la Semana Santa, para aprovechar esos días más tranquilos y poder hacer el traspaso ordenado que los menos expertos, como es mi caso, precisamos", prosigue.

En cuanto a su nombramiento al frente de Fomento, Blanco afirma que "ha sido un día importante para mí y abre una nueva etapa en mi vida que quiero compartir con vosotros desde el primer momento".

Periodista Digital

Las presiones de Prisa dejan la TDT de pago en papel mojado

El Gobierno ZP recula. La TDT de pago duró sólo unas horas. Las presiones de Prisa frenaron lo que ya era el sueño de Roures. Desde el despacho de De la Vega otro comunicado de prensa frenó el paso dado por Miguel Sebastián desde Industria, esta vez en forma de rectificación para decir que de lo dicho, casi nada, que no habrá TDT de pago hasta que las condiciones y su puesta en marcha se aprueben en Consejo de Ministros.

Lo que ayer era un mero trámite administrativo hoy ya no lo es: las cadenas pueden pedir TDT de pago, pero, hasta que el Consejo de Ministros no decida cómo y cuándo se va a implantar, no se tramitarán esas solicitudes.

El Ministerio de Industria aclaró anoche que la puesta en marcha de la televisión digital terrestre (TDT) de pago "y sus condiciones" están pendientes de un acuerdo del Consejo de Ministros.

El departamento de Miguel Sebastián salía así al paso de una nota de prensa emitida por el propio ministerio a primera hora de la tarde en la que se anunciaba: "A partir de hoy, los operadores privados de televisión podrán solicitar la autorización para prestar el servicio de TDT de pago". Esta nota, según fuentes de Industria, fue publicada mientras el ministro se encontraba de viaje y fruto de la "precipitación" de su equipo.

El sueño de la TDT de pago apenas duró cinco horas. Llegó por sorpresa en forma de discreto comunicado de prensa colgado en la web del Ministerio de Industria y de repente se esfumó, tras una tarde que terminaba con la renuncia del Gobierno ante las presiones de Prisa. Marcha atrás repentina y ralentización para un compromiso adquirido con el sector por la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, como recuerda El Mundo.

Un párrafo para despacharse una polémica que aún coleará mucho tiempo. Porque lo que establecía el primer comunicado era justo lo contrario, que bastaba un trámite administrativo para iniciar un procedimiento que finalizaba con la autorización para abrir una ventana de pago en un canal de TDT, previo informe del Consejo de Estado y aprobación en Consejo de Ministros.

La productora Mediapro, con la que Prisa libra la guerra del fútbol, era ayer, a priori, la principal beneficiada con la puerta abierta a la TDT de pago (tiene los derechos de casi todos los equipos de Primera, los de la Fórmula 1 y un canal para comercializarlo todo, Gol TV). Jaume Roures, uno de sus máximos responsables, se apresuró a asegurar que presentará su propuesta en Industria después de Semana Santa. Otra cosa es que se la tramiten.

Opiniones enfrentadas

La Sexta recibió con satisfacción la noticia ya que, de acelerarse la TDT de pago, sería una de las grandes beneficiadas. "Era una petición del sector del pasado mes de octubre, que contó con el compromiso del Ejecutivo para su aprobación a finales de marzo o abril y eso es lo que ha hecho hoy". La empresa Mediapro, con intereses en La Sexta, anunció el pasado mes de agosto la comercialización de una oferta de fútbol de pago a través del canal Gol TV.

Telecinco recibió mal la medida por considerar que "no era una prioridad para el sector" y "está hecha a la medida de aquellos que en los últimos años han adquirido derechos explotables en esta modalidad", señaló un portavoz en referencia a Mediapro. Antena 3 se mostró a favor de "cualquier medida que suponga flexibilizar el sector".

El grupo PRISA (editor de EL PAÍS y propietario de Sogecable) señaló, en una nota emitida antes de que Industria rectificara su primer anuncio: "La nota de prensa sobre la TDT de pago no hace sino aumentar la confusión acerca de las políticas audiovisuales del Gobierno. Aunque es preciso un análisis técnico más elaborado de la declaración hecha pública, la Ley no contempla la TDT de pago, por lo que la decisión del Ministerio de Industria no es válida".

Periodista Digital

Un deslucido relevo a tono con la crisis

LAS PALABRAS, los silencios, las ausencias y las demasiado previsibles presencias en las tomas de posesión de los nuevos ministros ofrecieron ayer una imagen con claroscuros del nuevo equipo de Zapatero.Especialmente deslucida fue la despedida de Pedro Solbes, en la que se hizo patente su poca sintonía con el presidente del Gobierno. Solbes, que agradeció a sus colaboradores el trabajo realizado en estos cinco años, no tuvo una sola mención para Zapatero e incluso se quejó de haber trabajado con «limitaciones», lo que obligó después a De la Vega a aclarar que el vicepresidente se refería sólo a dificultades derivadas de la crisis económica.

Si la comunicación entre un presidente y su responsable de Economía ha de ser especialmente fluida en cualquier gobierno, en época de recesión y con 3.500 nuevos parados de media cada día esa relación debería ser privilegiada. Sin embargo, Zapatero ha ninguneado continuamente a Solbes, haciéndole luz de gas desde la Oficina Económica del presidente, dejándole al margen de operaciones teledirigidas desde Moncloa de la envergadura de la OPA sobre Endesa, prescindiendo de él en asuntos como la financiación autonómica o imponiéndole medidas como la ayuda de los 400 euros. Estos desencuentros han influido probablemente más en el ánimo y el cansancio de Solbes que la propia tarea ministerial. Alguien que sólo está fatigado ni pide el relevo a gritos como hizo al afirmar que sentía «envidia» del destituido Bermejo ni protagoniza una despedida tan fría como la de ayer.

Las sospecha de que el nombramiento de Elena Salgado responde más a un enroque del presidente que a una apuesta por aportar nuevas ideas ha empezado también a tomar cuerpo. El estupor con el que el mundo económico ha recibido a Salgado tuvo fiel reflejo en su toma de posesión, prácticamente huérfana de personalidades de este ámbito. La nueva vicepresidenta estuvo arropada casi en exclusiva por sus amistades políticas y el resto de ministros.Esa soledad fue más evidente si cabe por la esperanzadora presentación de José Blanco en el Ministerio de Fomento. En contra de lo que parecía predecible, el vicesecretario general del PSOE estuvo acompañado por destacados líderes políticos y empresariales como Esperanza Aguirre y Gerardo Díaz Ferrán, a los que invitó en un gesto de apertura y de búsqueda de entendimiento. Blanco era ayer, por su evidente perfil político como látigo socialista durante nueve años, el ministro peor recibido por los lectores de elmundo.es. Sin embargo, empieza a dar muestras de que puede reinventarse como ministro y habrá que esperar a ver su trabajo antes de juzgarle.

Muy previsible, en cambio, fue la llegada de Angeles González-Sinde a Cultura. Pilar Bardem, José Luis Borau, Elías Querejeta...A su lado estuvieron muchos representantes del cine, a los que Zapatero ha querido entregar el Ministerio a través de la guionista.Si Blanco llega condicionado al Gobierno por su perfil político, González-Sinde lo hace marcada por su procedencia, y deberá demostrar que su misión no se limita a conseguir dinero para sus colegas del cine.

El relevo de despachos más amable lo protagonizó Trinidad Jiménez, tanto por su talante como por la simpatía con la que Bernat Soria le entregó la cartera. Las presentaciones de Chaves y de Gabilondo, con llamadas al diálogo y al consenso, estuvieron en la línea de lo esperado. A lo deslustrado de algunas de las tomas de posesión ha contribuido sin duda la falta de audacia de Zapatero en la elección de los nuevos ministros y al hecho de que se filtrase con tanta antelación su nombramiento. La comunicación, en la que Zapatero es especialista, ha fallado. Hay que esperar ahora a valorar el trabajo.

El Mundo - Editorial

El lobby del cine celebra su llegada al Gobierno tras años de agitación

EN LA TOMA DE POSESIÓN DE GONZÁLEZ SINDE

La toma de posesión de González Sinde ha resultado esclarecedora. Besos y abrazos en un ambiente de compadreo entre ministros y miembros del lobby del cine, con Pilar Bardem como cabeza visible. La misma que ha protagonizado estos años de agitación política, siempre a favor del PSOE.

El "no a la guerra", las "rosas blancas", el "cordón sanitario"… El lobby del cine ha protagonizado multitud de actos de agitación política. Siempre contra el PP, siempre a favor del PSOE, siempre con Pilar Bardem. Por eso, su presencia en la toma de posesión de Ángeles González Sinde como ministra de Cultura, refleja a la perfección el significado de este nombramiento. No se puede decir que hayan intentado disimularlo. Multitud de besos y abrazos entre ministras y dirigentes del PSOE con Bardem y algún otro miembro del lobby.


Un nombramiento que, lógicamente, ha generado enorme preocupación entre asociaciones de internautas y quienes tengan un mínimo apego por la libertad. En la rueda de prensa tras la primera reunión del remodelado Consejo de Ministros, María Teresa Fernández de la Vega ha salido en defensa de la recién nombrada Ángeles González-Sinde. “Por su perfil profesional va a hacer una labor extraordinaria”, ha dicho al ser preguntada por LDTV por el malestar entre los internautas por su oposición al P2P.

Según De la Vega, la nueva ministra “va a llevar hacia delante todos los retos”. No ha especificado cuáles. “Somos muy sensibles a todas las reivindicaciones de la cultura y todos los agentes”, lo que incluye a los internautas, según ha dicho. "La tarea es armonizar los intereses vinculados a la red, a la propiedad intelectual y a lo que se refiere a la creación audiovisual", insistió.

González-Sinde “no va a escatimar esfuerzos en aglutinar posturas con el fin de seguir potenciando nuestra Cultura”, dijo. Ahí, afirmó, “tienen un papel muy importante los internautas”. “Contaremos con ellos, queremos que sean protagonistas”, indicó.


La vicepresidenta ha asegurado también que los nuevos ministros ya "trabajan a pleno rendimiento", siempre "liderados por el presidente". Pero a pesar de la gran remodelación del Ejecutivo, la socialista cree que "en la dirección correcta es en la que venimos trabajando" sólo que ahora hay "un nuevo ritmo y energías renovadas".

Además, De la Vega ha confesado que "nos hemos comprometido a ser más eficaces para salir cuanto antes de esta situación". De hecho, dijo que la solución pasa por "crear una cultura de la cooperación". "Los ciudadanos nos piden resultados y tenemos la responsabilidad de responder desde la cooperación", sentenció.

Sin embargo, tras hablar de cooperación y diálogo no dudó en atacar al PP. "Confiamos en que el principal partido de la oposición entre, aunque sea por una vez, y abordemos la situación desde el dialogo para sacar este país adelante", espetó la socialista.

Libertad Digital

La esclerosis política del PSOE. Por Valentí Puig

ERAN jóvenes y osados. Trinidad Jiménez -ahora finalmente ministra- puso el piso para reunirse. Pedían una oportunidad, sin pretender hacer mucha Historia. Fue un sesgo de luz que descontaminó ilusoriamente el XXXV Congreso del PSOE, año 2000. De allí salió el zapaterismo, con relato poco épico, tan acomodaticio a las brisas de la demoscopia y el marketing electoral, tan inmovilista. Al comparar el zapaterismo con el felipismo, el componente reformista de González resalta. De otra parte, si finalmente González llevó el PSOE casi al límite de la quiebra moral, Zapatero culmina la esclerosis de su sistema nervioso central. Tacticista, muy parco con la verdad, Zapatero llegó a la secretaría general del PSOE y después del atentado de Atocha las urnas le entregaban La Moncloa. Fue una primera legislatura que avanzó de forma espasmódica, gracias a la extremada confianza de Zapatero en un destino político y personal que se le mostraba favorable. Torpemente, el PP puso a sus pies la alfombra al tardar demasiado en asumir que había perdido las elecciones.

A un año de su segunda victoria electoral, los síntomas de esclerosis están colapsando aquel nuevo PSOE. Ha perdido masa muscular, padece alteraciones de la visión, sus movimientos cada vez son más descoordinados. La prueba está en una remodelación de gobierno que tan solo al romper aguas se ha visto exhausta y mustia. Las figuras del banquillo ya no dan para mucho más. En un momento en que el país necesitaba de un gobierno que fuese la locomotora de la recuperación económica, resulta que en La Moncloa se dan indicios de disnea y parálisis.
¿Es posible revertir una situación tan desafortunada? Examinar el sistema visceral del nuevo gobierno dificulta compartir la idea de que quedan reservas de energía para salir adelante y ofrecer a la sociedad española la confianza que hace falta para afrontar una recesión económica tan aguda. Zapatero ha cruzado la línea roja. Todo eso nos va a salir carísimo. Es improbable que con las estrategias que ha oído comentar en el G-20 Zapatero consiga amansar la crisis, actuando como ventrílocuo con la ministra Salgado. En un alto del camino ha quedado Solbes, desactivado, como un juguete roto.
Chaves en el Gobierno representa la inercia más definitoria del Zapatero de hoy. Tenía un problema sucesorio en el PSOE de Andalucía, necesitaba cambiar candidato para atajar al PP de Javier Arenas, y ha actuado con la maniobrabilidad plúmbea de un inquilino del parque jurásico. El socialismo andaluz durante tan largo tiempo en manos de Chaves significa dependencia, mucho paro, ley de oligarquía partitocrática, coerción de creatividad civil, caciquismo del XIX puesto en un disco duro del siglo XXI. Gran caladero del voto socialista, Andalucía se convierte en paradigma esclerótico del PSOE de Zapatero aunque a Chaves se le tuviera en Madrid con poco presupuesto y escasas competencias.
Ciertamente, en el escenario de la política todo es posible, incluso las resurrecciones. Después del desperfecto de las elecciones gallegas, a Zapatero le queda la oportunidad de las elecciones europeas en junio y para eso ha hecho su remodelación de gobierno, pero sin el perfil de calidad, innovación y estabilidad que un electorado ansioso espera para confiar en algo. Salvo un trance de transfiguración, el problema cada vez más será Zapatero. No hay impedimento mayor a la imprescindible sincronización del PSOE con lo que es el futuro. Es desapacible circunstancia para una sociedad que se siente desalentada, carente de hoja de ruta, cercada por la incertidumbre y el paro.

ABC - Opinión

De Malraux a Sinde. Por Cristina Losada

Cultura

«Más preocupante resulta que la cultura en España se haya identificado hasta tal punto con el famoseo, que cuando se habla del "mundo de la cultura" las grandes referencias son Pilar Bardem y otros ilustrados miembros de cofradías como la PAZ y la Ceja.»


Dicen que Zapatero deseaba que César Antonio Molina hubiera sido su Malraux. El auténtico Malraux, ministro de Cultura de De Gaulle, fue recibido en la Casa Blanca de Kennedy con una cena a la que asistieron doscientos escritores, pintores, actores y músicos. Saul Bellow cuenta que en ese banquete varios literatos proclamaron que daba comienzo una nueva era, pues la presidencia de Estados Unidos, apegada durante tantos años a los calzoncillos largos, o sea, pueblerina, por fin se modernizaba y respetaba la cultura. Con tales actuaciones, la presidencia de Kennedy, en vez de quedar marcada por sus desastres, pasaría a la historia como la viva imagen de un moderno Camelot. El problema de Zapatero de cara a la posteridad es que a su particular Camelot le sobra la última letra.


El ascenso de González Sinde a las alturas ministeriales ha sido acogido con hurras por sus compañeros del cine. Ha sido todo un éxito el suyo. Han tumbado a Molina, que no satisfacía con la diligencia debida sus demandas. Naturalmente, de dinero. Podemos hacer chistes sobre cómo el cine se carga a la literatura, como también sobre el hecho de que el estado de la cultura venga determinado por la cultura del Estado. El cine español, desde luego, vive del Estado, quiere decirse de los contribuyentes, y ése es el círculo vicioso que lo condena a la ruina y a nosotros a pagarla. Ha dicho Sinde que cree en la cultura como generadora de bienestar. Desde que Freud escribió El malestar en la cultura ha llovido mucho. Hemos pasado a la incultura del malestar y al bienestar de la cultura. Sinde buscará, por lo menos, el bienestar de la industria del cine.

El lobby del cine ha colocado en la cúspide a uno de los suyos, pero este nuevo Gabinete de Zapatero es un Gobierno de concentración de lobbys y lobbytomizados que tendrán que andar a la rebatiña por el presupuesto. Más preocupante resulta que la cultura en España se haya identificado hasta tal punto con el famoseo, que cuando se habla del "mundo de la cultura" las grandes referencias son Pilar Bardem y otros ilustrados miembros de cofradías como la PAZ y la Ceja. A una recompensa por estas actividades lúdico-políticas de la farándula se atribuyen el cese de Molina y la llegada de Sinde. Sería, así, un intercambio de subvenciones por respaldo político. Pero esta explicación de determinismo económico olvida que los gobiernos del PP no cerraron el grifo a la industria cinematográfica.

Es verdad que Sinde no podrá ser el Malraux de Zapatero, pero a cambio la guionista de películas con títulos tan estimulantes desde el punto de vista cultural como Mentiras y gordas o La puta y la ballena no tendrá dificultades para superar a la inolvidable "pixit y dixit".

Libertad Digital - Opinión

Maneras de ser ministro(a). Por Ignacio Camacho

PARA formar un Gobierno se necesita haber ganado antes unas elecciones, pero para entrar en él puede resultar útil haberlas perdido, siempre que se tenga la promesa de un premio de consolación al esfuerzo de la derrota. Es el caso de Trinidad Jiménez y de Miguel Sebastián, unidos por su condición de víctimas de la arrolladora pujanza de Alberto Ruiz Gallardón, que se los merendó consecutivamente en sus respectivos intentos por alcanzar la Alcaldía madrileña. Gallardón se ha convertido en una máquina de hacer ministros a base de vapulear a sus adversarios, con la condición de que éstos sean favoritos de la consideración de Zapatero. Va a haber tortas por ser candidato en Madrid, donde recibir una soberana paliza en las urnas parece garantía de acceso al Consejo de Ministros. El presidente siente predilección por los perdedores, incluso antes de que lleguen a serlo; ha bastado que el espejo de las encuestas refleje una imagen en declive en Chaves para que lo llame a una vicepresidencia.

También existen otras formas más obscenas de tráfico de favores que se convierten en papeletas premiadas para la pedrea del Gabinete. Por ejemplo, formar parte de algún «lobby» de resonancia mediática que haya creado una deuda moral con la causa zapaterista. El de la «zeja», mismamente, sectaria tribu de cómicos y adláteres caracterizados por la común idea de que el Gobierno es una institución benéfica con la misión intrínseca de subvencionar su discutible talento. Algunos gobernantes utilizan el Ministerio de Cultura -invento francés destinado a poner un broche de glamour en el prosaísmo burocrático de la Administración- para adornar su equipo con alguna personalidad de relumbrón y carisma, como fue el caso de Melina Mercuri en Grecia, pero Zapatero lo contempla más bien como instrumento de pago para servicios mercenarios. La solidez intelectual del poeta César Antonio Molina, hombre de criterio cabal, independiente y ecuánime, le parecía demasiado soberbia e inmanejable para este escabroso y directo «quid pro quo», así que lo ha cambiado por una guionista mediocre -¿alguien ha visto «Mentiras y gordas»?- que ocupaba la jefatura gremial de su clan de intereses. Para el presidente, la cultura no es el castellano, los museos, el patrimonio o la música, sino lentejuela y oropel, pancarta y activismo, colorín y gala de los Goya con camisetas sobre la guerra de Irak. Descartado Corbacho, porque ya tiene uno en el Gobierno, y con Blanca Portillo demasiado ocupada en su deslumbrante Hamlet, ha echado mano de Ángeles González Sinde para que le escriba los libretos de su retórica insustancial y vacía a cambio de otorgarle el control de la caja de las subvenciones. Esto debe de ser la posmodernidad política: sustituir el esquema de un proyecto por el guión de un espectáculo.

ABC - Opinión

Surtido de perplejidades. Por José García Domínguez

Nuevo Gobierno

«País raro, éste. Promociona el turbio Blanco a la cúspide de un ministerio técnico, quizá el más difícil y complejo entre todos los que dan cuerpo a cualquier Estado moderno. Un célebre pícaro, amén de notorio iletrado.»

Desconcertante país, España. La prensa, unánime, tanto la de izquierdas y la rajoyesca como la de derechas, coincide en denunciar la más grave tara del nuevo Gobierno, a saber, que la señora de Orense adolecería de la mínima formación requerida para dirigir el Ministerio de Economía. Por lo visto, nada importa que el currículum de la señora de Orense acredite, entre otros notables méritos académicos, tales como poseer una ingeniería superior, que también es licenciada en Económicas.


Al contrario, quizá sea tamaña excentricidad –el que por primera vez en lustros un economista resulte llamado a dirigir la economía– lo que la inhabilite para el cargo. Repárese al respecto en que tanto Solbes como Rato, dos cráneos presuntamente privilegiados cuya pericia numérica nadie osa poner en cuestión, son simples licenciados en Derecho. País raro, éste. Promociona el turbio Blanco a la cúspide de un ministerio técnico, quizá el más difícil y complejo entre todos los que dan cuerpo a cualquier Estado moderno. Un célebre pícaro, amén de notorio iletrado, administrando una organización que gestiona recursos superiores a los de muchas multinacionales. Bien, pues la misma prensa que se escandaliza con el libre albedrío de ‘Pepe el del Popular’ recibe, indiferente, el inaudito nombramientoen Fomento. Eso, cuando no da en celebrarlo con desconcertante alborozo.

Así El Mundo, que en el clímax del delirio ha llegado a equiparar a ese alter ego del Buscón Don Pablos con Michal Kalecki, el genial autodidacto polaco que se adelantara a Keynes en la formulación de los conceptos clave de la Teoría general. Y es que ya deben faltar menos de cinco minutos antes de que descubran en el corruto de Palas de Rei a un nuevo Miguel Hernández. O quizá a la genuina reencarnación de Jorge Luis Borges, que también pudiera ser. País cómico, España. Leo en el periódico de Gabilondo que Gabilondo "asume Educación para evitar la revuelta estudiantil". Infiero, consternado, que los estudiantes españoles tenían previsto iniciar una violenta revolución en las calles si Gabilondo no hubiese visto satisfecho su deseo de sentarse en el Consejo de Ministros. Mas, por ventura, el nombramiento ha evitado la eclosión de un nuevo y sangriento mayo del 68. Alegrémonos de nuestra inmensa fortuna: gracias a Gabilondo ha estallado la paz.

País penoso, el de Prisa. Y también el otro.

Libertad Digital - Opinión

Zapatero, gran reserva. Por M. Martín Ferrand

LOS politólogos más conspicuos tratan de analizar la génesis, el desarrollo y la potencialidad de la crisis gubernamental que acaba de rematar José Luis Rodríguez Zapatero. Como es costumbre en tan acreditado grupo de expertos, miran y remiran los nuevos nombres incorporados al Gabinete, y a la ascendida Elena Salgado, con el interés que un tratante de ganado analiza el diente de la caballería antes del trato. Están condenados al fracaso. Zapatero y la lógica son conceptos antagónicos y tratar de deducir de un rasgo biográfico de los nuevos ministros una intención del líder socialista es tarea inútil. Sin sentido. Cinco años de experiencia les ha enseñado a los más eximios zapaterólogos que el método prospectivo válido para la predicción de la conducta del vallisoletano que dice ser de León es el mismo que sirve para anticipar el número premiado en un sorteo de la lotería.

Se pueden extraer más enseñanzas con el repaso de los nombres que permanecen. Los que se han salvado de la quema reflejan el espíritu de un líder contradictorio, sin más constantes que el rencor histórico y el ánimo confederal. Dejando aparte a María Teresa Fernández de la Vega y Alfredo Pérez Rubalcaba -el Gobierno propiamente dicho- la supervivencia en el cargo de personajes como Miguel Ángel Moratinos, Bibiana Aído, Miguel Sebastián o Carme Chacón -cuatro patas para el banco de los errores- acreditan el amor de Zapatero por la contumacia. Han sido, con Magdalena Álvarez, los nombres más justamente criticados en el equipo y ahí siguen, en el machito. Es el desplante del líder, su toque de provocación y su exhibición de poderío. Moratinos es un náufrago en la política exterior que, en guerra con Chacón, se rebotan mutuamente los ridículos de nuestra proyección exterior. Aído, un capricho, hace lo que no sabe para poder hacer algo y Sebastián, el desertor del Ayuntamiento de Madrid, nos debe una bombilla. Con ellos, Celestino Corbacho -un millón de parados en un año de gestión-, Cristina Garmendia y Elena Espinosa son la sublimación de la impotencia, la nada política. De Francisco Caamaño no cabe opinión alguna, que todavía están calientes los restos de su predecesor, Mariano Fernández Bermejo, y no sé si procede incluir en esta lista a Beatriz Corredor, según el BOE titular de Vivienda, porque no está probada su existencia política. En ellos Zapatero luce plenamente. Son su gran reserva.

ABC - Opinión

Tristes lodos de Verdún. Por Hermann Tertsch

YA tenemos un gobierno nuevo, queridos lectores. Con todos los ministerios que había, sepa Judas para qué. Y una Vicepresidencia más que todos esperamos nos sea muy útil para resolver los problemas de subsistencia y convivencia que se nos echan encima como una marabunta bien alimentada por unos fondos públicos tan profusamente utilizados por los gobernantes para alimentar a las hormigas fieras. Aquí estamos ahora con un Gobierno que no se cree nadie y al que nadie otorga ya, al segundo día de su existencia, ni la menor posibilidad de contener la plaga. Ni cien días ni niño muerto. No encuentro a nadie serio que crea que este Gobierno se ha hecho para otra cosa que no sea su propia y pura subsistencia. Veremos si consigue superar el verano y las elecciones europeas. Por mucho que hayan incorporado a piezas de combate de trinchera.

La toma de posesión de nuestra nueva «Cavallería Rusticana» de Cultura lo dice todo. Allí estaba toda la tropa de la secta dispuesta a un imaginario y patético «no pasarán» -también de un «nos lo llevamos todo»- mientras las realidades de nuestro país van mostrando un declive y una degradación vertiginosa. Allí estaba casi de ministrable una Pilar Bardem que, no me cabe duda, llegado el caso, enviaría a media sociedad española a la Checa de Fomento. Y allí estaban junto a la nueva ministra de la subcultura de algunos de ellos, los más fervorosos agitadores y beneficiarios del rencor en este país. Allí estaba toda la arrogancia y prepotencia del izquierdismo carpetovetónico, que tanto tiene que ver con la miseria revolucionaria tercermundista o soviética y tan poco en común con la socialdemocracia cultivada de la tradición europea. Que tanta amistad y empatía tiene con asesinos como el Ché Guevara o Fidel castro, con milicos déspotas como Hugo Chavez o tiranos comunistas. Y tan poca afinidad con humanistas de la izquierda europea como Helmut Schmidt, Willy Brandt, Olof Palme o Bruno Kreisky. Probablemente muchos de la tropa no sepan siquiera a quienes me refiero.

Algunos estamos curados de espanto. Y hemos visto cosas mucho peores. Pero da bastante miedo ver la íntima comunión entre poder y vocación abiertamente totalitaria que se vio ayer en el «sarao» de la toma de posesión de la ministra de cultura. Está claro que el señor Zapatero sabe que no puede sacar a este país de un pozo negro que tanto a contribuido él a abrirnos. Pero está también claro que su tropa se atrinchera para defenderse en un frente que cada día nos evocará más a un Verdún económico, político y desde luego social y cultural. Nuestro código social no conoce ya el pecado. Y ni la impericia ni la ineptitud son delitos. Pero quiero pensar que hay una sociedad española en la que rige aun una cierta percepción de la responsabilidad histórica. Y espero que no le pase inadvertida esta grotesca y peligrosa aventura del maridaje entre inanidad moral y arrogancia irresponsable.

ABC - Opinión

Cortejo a Turquía

El cierre en Turquía de la lucida gira europea de Barack Obama, justo antes de una escala sorpresa en Bagdad que demuestra los reflejos del presidente estadounidense, es probablemente la decisión más significativa del intenso viaje-presentación destinado a plantar las semillas de las nuevas relaciones transatlánticas. Si en Londres o Praga Obama asistió a cumbres bien coreografiadas, donde ha impulsado un G-20 reformista, conseguido un moderado apoyo a sus planes para Afganistán o desvelado una iniciativa para rebajar los arsenales nucleares, todo ello en el guión, en el Parlamento de Ankara el reto era mayor. Desde la puerta de entrada al mundo musulmán, un presidente de Estados Unidos se ha esforzado por explicar con la solemnidad requerida que su país no está en guerra con el islam, una idea que ha calado en los últimos años como consecuencia de las políticas seguidas por Bush en Irak o Afganistán o a propósito del conflicto palestino-israelí. El inquilino de la Casa Blanca besando en las mejillas a un líder turco, Erdogan, no es cosa que se vea todos los días.

Turquía, miembro clave de la OTAN como puente entre Europa y Asia, es política y militarmente un aliado decisivo para EE UU, con influencia en Oriente Próximo y el sur del Cáucaso. Interlocutor privilegiado de Washington en los más importantes conflictos abiertos con el mundo islámico, desde los palestinos, hasta Irak y Afganistán, el Gobierno del conservador Erdogan desempeña un discreto papel mediador entre Israel y Siria, tiene hilo directo con Hamás o Sudán y lleva valiosos recados a Irán, régimen con el que Obama quiere el deshielo y al que los aliados occidentales acaban de invitar de nuevo a dialogar sobre sus ambiciones nucleares. Pero a la vez que Turquía dispone de algunos de los canales de comunicación de los que EE UU carece en la región, es también uno de los países del mundo más consistentemente antiamericanos. Esta militancia popular, acusada exponencialmente en la presidencia de George W. Bush, carga más de significado el conciliador mensaje de Obama desde la atalaya turca.

A cambio de lo mucho que EE UU espera de Turquía, Obama probablemente esté dispuesto a olvidar su promesa electoral de impulsar en el Congreso la calificación de "genocidio" para las matanzas turcas de armenios en 1915, ahora que ambos enemigos históricos parecen a punto de concluir un acuerdo de relaciones diplomáticas mediado por Suiza. Como anticipo a cuenta de la estrecha alianza que Washington quiere potenciar, Obama ha urgido a la Unión Europea para que acoja las aspiraciones de integración turcas, en un momento en que hay evidentes signos de distanciamiento entre Ankara y Bruselas. Coinciden en ello un claro e inquietante enfriamiento del otrora fervor prodemocrático y reformista de Erdogan y el fortalecimiento de los puntos de vista francés y alemán sobre la conveniencia de dar tiempo al tiempo.

El País - Editorial

Zapatero y el refugio de la amistad

«No le faltaría razón a Zapatero al destacar el gran "peso político" de su nuevo gobierno si, por tal, debemos entender, no la preparación y capacidad de gestión de los nuevos ministros, sino su confianza, lealtad, incluso amistad hacia el presidente»

No le faltaría razón a Zapatero al señalar el gran “peso político” de su nuevo Gabinete si por tal debemos entender, no la preparación y capacidad de gestión de los nuevos ministros, sino su confianza, lealtad, incluso amistad hacia el presidente del Gobierno. De hecho, este perfil "político" es el más claro denominador común de los nuevos miembros del Ejecutivo, al margen de la nula o mala experiencia profesional que pueden acreditar en las áreas que les han sido encomendadas.


Empezando por Elena Salgado, su designación oficiosa como sustituta de Solbes al frente del Ministerio de Economía y Hacienda ya había provocado en los últimos días gran “estupor” en medios académicos, sindicales y empresariales, donde se le reconocían sus dotes de política, pero ninguno de economista (exceptuando su licenciatura, cosa que no es poca a la vista del curriculum de alguno de sus nuevos compañeros). Con todo, y al margen de sus polémicas en torno a las campañas contra el tabaco o el vino durante su etapa como ministra de Sanidad, y su gris paso por el Ministerio de Administraciones Públicas, parece que el perfil y la trayectoria de Salgado no son precisamente las del gestor económico reformista que requiere una crisis de la envergadura de la que estamos padeciendo.

En cuanto a la entrada de Manuel Chaves en el Gobierno, además de lo que también tiene de vuelta al felipismo, nos hace recordar que el andaluz ha sido hasta ahora el presidente autonómico con mayor paro de nuestro país, sin que su tarjeta de visita como antiguo ministro de Trabajo en tiempos de González mejore mucho su presentación. Está por ver si su entrada como nuevo ministro de Coordinación Territorial supone un cambio de inflexión en la descoordinadora e irreconciliable condescendencia que desde el Gobierno de Zapatero se ha venido mostrando ante cualquier reivindicación desde el ámbito autonómico.

Las designaciones de Ángel Gabilondo, como titular de Educación, y de Ángeles González-Sinde, como ministra de Cultura, demuestran hasta qué punto Zapatero sabe agradecer a “los artistas de la ceja” el apoyo recibido. Al margen de haber participado ambos en esa campaña de propaganda a favor de Zapatero, el “hermanísimo” de Iñaqui Gabilondo y rector de la Universidad Autónoma de Madrid se ha destacado por la politización del ámbito universitario y por la condescendencia con la que ha tratado a los grupos de extrema izquierda, sin olvidar el “doctor honoris causa” concedido a Santiago Carrillo. En cuanto a González-Sinde, su trayectoria como profesional y lobbysta del séptimo arte, sólo nos aboca a esperar que el ministerio del que ahora se va a hacer cargo sea, más que nunca, el de la cultura de la subvención y de la propaganda.

Al margen de que no acabara la carrera de Derecho, las comparecencias públicas de José Blanco bastan para darnos cuenta de que nos encontramos ante una persona que no se destaca precisamente por su formación cultural y académica. No obstante, no lo tendrá muy difícil para superar a su antecesora en el cargo, lla polémica Magdalena Álvarez. En cualquier caso, su trayectoria es inseparable de la de Zapatero desde que le ayudara a convertirse en nº 1 del PSOE; desde entonces, ha sabido dirigir con mano de hierro el partido y actuar como oposición de la oposición.

Podemos concluir afirmando que, si bien esta amplia remodelación del Gobierno a un escaso año de su nombramiento evidencia el fracaso de Zapatero, nada nos indica que su nuevo equipo vaya a ser mejor que el anterior. Más bien nos demuestra su deseo de escudarse en personas de su máxima lealtad y confianza como forma de capear, que no afrontar, la crisis que durante mucho tiempo nos va a azotar. Ya decía el Libro del Sirácida que “un amigo fiel es un refugio seguro”. El problema está donde, con este Gobierno, encontramos refugio el resto de los españoles.

Libertad Digital - Editorial

SINDEscargas

SINDEscargas.net es una página web que solicita la destitución de la ministra de cultura que acaba de prometer su cargo, Ángeles González-Sinde, por su evidente condición de juez y parte, su pasado sectario y sus declaraciones gruesas que la incapacitan completamente para el ejercicio del cargo para el que ha sido designada. Un nombramiento que Pedro J. Ramírez en su videoblog diario califica directamente y con toda la razón como de “obsceno”, siguiendo el mismo razonamiento de poner a la zorra a cuidar del gallinero que ayer apuntaba Antonio Delgado en “Una radical en el ministerio de cultura“.

Tal vez lo que se esté escenificando sea lo que Julio Alonso escribió ayer en su pagina, en una entrada que vale la pena leer: “El día que Zapatero perdió Internet“.

La página ofrece además la posibilidad de firmar contra el canon al ADSL que esta iluminada solicitó de manera insistente antes de acceder al cargo que ahora tristemente ocupa. Entre tanto, el grupo de Facebook solicitando el cese de la ministra ya supera los seis mil miembros, multiplicando por mucho la popularidad habitual del político medio en esta red social y dando una idea clara de la magnitud del movimiento de oposición a tan equivocado nombramiento. Nos toca demostrar que los internautas no somos cuatro gatos, que no somos una panda de tipos raros cuya opinión se puede ignorar alegremente, que somos representativos de un amplio sector de la ciudadanía y que la política no puede de manera sistemática ignorar nuestras peticiones, no puede hacerse al margen de la opinión de los ciudadanos.

La página se une a “Sinde Pírate“, a “SINDEmocracia“, al Twitter correspondiente y a tantas más que sin duda van a ir saliendo. El coste de adherirse a todas cuantas iniciativas puedan surgir en este sentido es prácticamente nulo, y el impacto podría llegar a ser importante. Hazlo. Firma. Difunde el tema. Escribe sobre ello. Informa a otros. Movilízate. Todo suma.


El blog de Enrique Dans