No seas mujer, actúa como tal

No es tanto un problema de colocar un número de mujeres, sino de que éstas ejerzan un liderazgo con perspectiva de género. El problema es qué modelo se ejerce en la política, es decir, que su actuación no sea femenina sino feminista”.

El creciente número de mujeres en altos cargos políticos es un hecho, ellas se van abriendo camino en un mundo tradicionalmente dominado por hombres, algunas lo hacen a dedo, otras son mujeres cuota que prestan su imagen pero no su cerebro y otras son elegidas directamente por los ciudadanos o por la estructura de su partido, hasta aquí todo normal. Sin embargo, nuestros amigos del progreso no ven razones para alegrarse por ello, una cosa es ser mujer y otra cosa es actuar como una mujer (o como debería hacerlo según ellos).

El País en este reportaje sobre el papel de las mujeres en la política española actual, reconoce que el PP lleva ventaja al PSOE en cuanto a mujeres políticas que ostentan altos cargos y sin necesidad de establecer cuotas. Pero Carmen Montón, portavoz de Igualdad del PSOE en el Congreso, resta importancia al asunto afirmando la perlita de ahí arriba.

El polilogismo asegura que la estructura lógica de la mente de los individuos es diferente según sea su raza, su clase social, sexo… Por ejemplo, los marxistas afirman que la estructura mental del obrero es distinta que la del burgués, y el obrero es el predestinado a acaparar el poder, con lo que un obrero que no opine lo mismo no es un buen obrero, no tiene conciencia de clase y merece ser, como mínimo, ignorado, burlado por los demás miembros de su clase. El polilogismo racista, por su parte, opina que los miembros de una raza poseen una estructura mental diferente y superior a la de otras razas. Y el polilogismo feminista, asegura que las mujeres piensan diferente que los hombres y deben actuar también de forma distinta, por ellas y para ellas, a favor de su sexo, son superiores y han estado toda la historia sometidas a los hombres, con lo que ahora hay que desquitarse, y toda mujer que no actúe como y para tal es que no es una buena mujer y merece el desprecio de las demás miembrAs del colectivo.

Para mujeres como la tal Montón, no importa que existan mujeres que hayan logrado alcanzar, por méritos propios, un puesto de responsabilidad, si dichas mujeres no sirven a su causa, a la causa del colectivo. Lo mismo ocurre con lo que piensan los homosexuales oficiales como Zerolo, para ellos, un homosexual debe ser, pensar y actuar como un auténtico homosexual, si no será despreciado y ninguneado, será simplemente un reprimido, no habrá peor homosexual que él, que no defiende los intereses de “los que son como él”.

Una vez más, nuestros amigos los socialistas se quitan la careta y afirman lo que son, colectivistas a más no poder, no creen en el individuo, no creen en que cada persona es y actúa de forma distinta ya sea mujer, hombre, blanco, negro, rico, pobre, hetero u homo y que es poseedor de unos derechos por el mero hecho de ser individuo, no por pertenecer a un colectivo.

La Libertad y La Ley