sábado, 9 de julio de 2011

PSOE. Por favor. Por Maite Nolla

A Zapatero se lo ha acabado cargando la economía. Ya ves tú, la economía. No tenía ni idea de economía, ni le importaba lo más mínimo, ni había ganado las elecciones para hacer en el Gobierno nada que tuviera que ver con la economía.

Visto el resultado, tuvieron la oportunidad de convocar elecciones la misma noche del 22 de mayo, y nada. Pudieron aprovechar el debate sobre el estado de la Nación para disolver y hacer algo medianamente digno, que es irse ya, y tampoco. Y ahora, nuevamente, en lugar de convocar elecciones para el primer día en que lo permita la Ley, tenemos que soportar otro cambio de Gobierno y el nombramiento de nuevos ministros para que Rubalcaba pueda preparar tranquilo su derrota.

Y es que no podemos perder de vista de qué tipo de políticos estamos hablando: llegaron arrasando con cualquier respeto mínimo al contrario y a la mitad de los españoles que no les votan, y para irse su conducta no es muy distinta. Su idea iba mucho más allá de gobernar y de aplicar su programa; su voluntad era la de mover la línea y situar a una gran parte de los españoles en la marginalidad, en la radicalidad y en la caricatura. Y en eso, su éxito ha sido razonable, y si no váyanse al ayuntamiento de Lizarza. Pero como la vida y la política tienen estas cosas, a Zapatero se lo ha acabado cargando la economía. Ya ves tú, la economía. No tenía ni idea de economía, ni le importaba lo más mínimo, ni había ganado las elecciones para hacer en el Gobierno nada que tuviera que ver con la economía; pero ha sido su tumba política. Por eso, en la réplica a Rajoy, en el debate sobre el estado de la Nación, sólo le faltó tirarle el micro. ¡Qué rabia! Zapatero nos había sido enviado para lo del Estatut y para compartir el premio Nobel de la Paz con Otegi, pero no para hablar de Moody’s o de las primas de riesgo.

Y, como les decía, se van a ir como vinieron. Ya no van a hacer nada de lo que les mandan y tienen una macroencuesta que apunta a un desastre total, y, en cambio ahí siguen, utilizando al Gobierno para que Rubalcaba haga oposición al Gobierno; total para nada, porque ya va tarde, y en lo que no va tarde es ridículo, y lo que no es ridículo es patético. Así que vamos a disfrutar durante unos meses más de este Gobierno sedado, para que Rubalcaba pueda hacerse una foto evitando que se cumpla alguna orden de desahucio de un juzgado de primera instancia. Iros ya, por favor.


Libertad Digital - Opinión

0 comentarios: