sábado, 20 de septiembre de 2008

Despiden a la monitora que denunció la imposición del catalán a niños de seis años

TRES DÍAS DESPUÉS DE SU TESTIMONIO EN EL MUNDO

Nuevo episodio de persecución del castellano. Después de denunciar en El Mundo que un colegio público de Barcelona le obligaba a ignorar a los niños de seis años que le pidieran pan, agua o pis en castellano, la monitora no ha sido renovada por los responsables del centro. La notificación le ha llegado sólo tres días después de sus declaraciones, según afirma el mismo diario.


Según publica el diario El Mundo este sábadosábado, Sara Burgos, la monitora de 22 años del colegio público Gayarre de Barcelona, ha recibido el comunicado de que no se le piensa renovar el contrato. La joven, una de las encargadas de cuidar a los niños de 1º de Primaria del colegio desde enero hasta el pasado 22 de junio, recibió instrucciones tajantes para no atender a aquellos niños que se dirigieran a ella en castellano.

En su lugar, Burgos debía obligarles a hablar en catalán con frases como "A veure, torna-m'ho a repetir que no t'he entes" (a ver, vuelve a repetírmelo que no te he entendido), según El Mundo. Ninguna excepción estaba permitida, ni siquiera con niños que tuvieran dificultad de habla.

Burgos denunciaba no sólo las férreas normas lingüísticas a las que se sometía a los niños, sino también las presiones sufridas para utilizar sólo el catalán en las comidas informales en las que les acompañaba el director del centro. Todo ello pese a que la totalidad de los empleados eran castellanohablantes y usaban el castellano en sus conversaciones.

A petición propia, tras las vacaciones escolares fue trasladada a un instituto público barcelonés para hacerse cargo de alumnos de 3º de la ESO. Tras aceptar el puesto, la empresa la emplazó a asistir a una reunión laboral para trabajar en el nuevo centro el pasado 3 de septiembre. Tras su celebración, "me dijeron que debía acudir el primer día de curso, el 15 de septiembre".

El martes 9 del mismo mes su relato apareció publicado en las páginas de El Mundo. El día 12 la joven recibió, en medio del puente celebrado en Cataluña con motivo de la Díada, una llamada del responsable de su contratación para informarle que no acudiera el día 15 a su nuevo lugar de trabajo.

"Me argumentaron que se había introducido unos problemas burocráticos con las becas de comidas de algunos alumnos y que no había muchos chicos en el grupo. Por lo tanto, no me necesitaban", declara la chica en El Mundo. Sara Burgos ha podido saber, sin embargo, que su plaza ha sido ocupada por otra persona.

La empresa subcontratada por la Consejería de Educación de la Generalidad para realizar el servicio de comedor del colegio público Gayarre es la Sociedad Anónima de Nutrición, Educación y Dietética (Saned), domiciliada en Barcelona. Según El Mundo, en su último ejercicio facturó más de cuatro millones de euros y cuenta con 340 empleados. Eduardo García Natividad, su único administrador, no pudo ser localizado por el rotativo.

Libertad Digital

Los pródigos hijos de puta vuelven a casa por Navidad. Por Tsevanrabtan

Liberalismo, ¡cuántas fechorías se cometen en tu nombre!

Un día les hablaré (aquí o allí) de un asunto que me inquieta hace muchos años y que tiene que ver con la acumulación de la riqueza, la sucesión hereditaria, el derecho ilimitado de propiedad, y cuestiones morales relacionadas con la desigualdad (como punto de partida) y, como correlación, hasta qué punto aquéllos son ingredientes imprescindibles o no para el funcionamiento de un sistema capitalista, de mercado, y, lo más importante, basado en la libertad real del individuo.

Esto se lo anuncio porque, aunque ahora no tengo tiempo para poder plantear de forma mínimamente seria esas cuestiones, sí tienen una relación perversa con la farsa actual, que saldrá a relucir de forma tangencial.

Resumamos: durante década y media (con algún susto) unos cuantos pastosos del mundo se han dedicado a demostrar lo adecuado del calificativo. Vale. Estos pastosos de los que hablo no son los dueños, no lo crean. Yo les hablo de los mayordomos. Los dueños son como el fantasma de las navidades futuras, un Calibán del que asoman millones de cabezas deformes y simpáticas.

Entiéndanme, no digo que las simpáticas cabezas no lleven un buen fajo de machacantes en el bolsillo. Lo que quiero decir es que los otros, los de las stock options y los contratos blindados son los que se han puesto gorrinos. ¡Algunos hasta se han hecho hombres de negocios respetables!

Naturalmente no hay enemigo más furibundo de la libertad económica y la competencia (la auténtica) que esos tipos. A ellos los que le va es la secta. Siempre es preferible ganar pasta sin darle a la mollera demasiado. La gente se equivoca; lo de que "inventen ellos" es una máxima universal. Por eso cuando hablan de libertad económica están siempre hablando de otra cosa. Lo que ellos quieren es una ecuación fantástica: que todo pueda convertirse en un número que incorporar a un balance, de forma que la realidad no estropee sus monopolis. Todo salvo sus contratos blindados, claro.

A mí lo de la libertad económica me parece de puta madre, ya lo saben. Pero está muy feo que se diga que las rigideces del mercado laboral, por ejemplo, provocan a la larga menor crecimiento, y que es mejor asumir las reducciones de coste de forma rápida (sin que aparezca como un pasivo oculto e imposible de valorar) para que el capital no se pierda en agujeros negros, y, sin embargo, cuando la pasta, por cientos de miles de millones, se utiliza para salvar a instituciones financieras en quiebra, el argumento sea el de la estabilidad. ¿En qué quedamos?

Naturalmente es comprensible que se quiera evitar que colapse el sistema financiero. Pero ¿debe hacerse prestando dinero que quizás no se recupere? ¿Qué sucederá si no puede devolverse? Y uno se pregunta por qué ese empeño que se vende en crear gigantes que luego tenemos que alimentar a toda costa, aunque estén afectados por una metástasis brutal. Y el tamaño se convierte en garantía de inmunidad. En círculo vicioso, se crea una estructura que reclama todas las ventajas del mercado libre, pero que no se ve afectado por ninguno de sus peligros: no se ve afectado por la competencia libre, porque compra voluntades y actúa monopolísticamente, y no se ve afectado por la bancarrota porque tiene secuestrada a la sociedad, que teme su caída.

Sí, los mayordomos juegan con dos barajas. Y cobran mes a mes, engordando sus patrimonios personales, repletos de cortisol, demostrando que ser el macho alfa sirve para algo. Irresponsables como niños de papá, viven como dios, porque papá estado les sacará de la mierda si hace falta, y no les costará más que una pequeña regañina.

Por eso cuando los "liberales convencidos" me comentan (en plan colega ideológico) que el asunto éste de si hacernos socialistas a tiempo parcial es delicado, pero inevitable, porque el remedio sería peor, siempre digo que no tendría problema en discutirlo una vez esté la cárcel llena de trajeados y una vez se declaren nulos todos los contratos y transferencias de dominio (incluidas las retribuciones de los altos directivos y dividendos) de (pongamos) un par de años antes de la quiebra. Aunque anticipo que, incluso así, será difícil que me convenzan de que el Estado no debe ser un pariente rico obligado a ayudar a empresas con problemas, sea cual sea su tamaño.

Yo no digo ¡viva la revolución! Digo ¡viva la retroacción! Pero nadie me hace caso.

Y es que estoy rodeado de putos rojos.

Rumbo a los Mares del Sur

Ikea vive en pecado (étnico)

Los ingenuos creen que con la salida de ERC del gobierno regional catalán la persecución lingüística se ha suavizado. Los ingenuos y los tontos útiles, que frecuentan algún que otro partido de ámbito supuestamente nacional.

En Cataluña funcionan, auspiciados por el gobierno regional y debidamente engrasados con dinero de todos los contribuyentes, numerosos organismos dedicados a la caza de brujas, todos ellos disfrazados de “sociedad civil”, según acepción de políticos y periodistas nacional progresistas.

Uno de los más conspicuos cazadores de brujas se llama Plataforma per la Llengua, que significa lo que parece pero está destinado a cosas bien distintas, básicamente la delación, el señalamiento étnico y la persecución lingüística. La macartista Plataforma per la Llengua se ha encargado, por ejemplo, de impartir clases de acoso lingüístico pagadas con dinero público, o ha practicado el señalamiento, al más puro estilo años 30, con otra empresa, Miguel Torres, incitando al boicot de sus productos.

En su actividad incesante en pos de la pureza étnico-lingüística, la susodicha plataforma denuncia ahora a la empresa Ikea, una multinacional que considera que la lengua que se habla en España es el español:
"Ikea se niega a repartir gratuitamente en los hogares catalanes su catálogo en catalán y sólo lo hará en la versión castellana. Tras 9 años incumpliendo la Ley de política lingüística, la multinacional del mueble y la decoración Ikea seguirá un año más sin repartir el catálogo en catalán. Como cada año, la versión que Ikea distribuye cada mes de septiembre en los hogares catalanes continuará siendo exclusivamente la castellana." (Plataforma per la Llengua)
Presionada por la Generalidad catalana, la empresa ha entrado en la enloquecida espiral a la que son sometidos los comerciantes e industriales en Cataluña y ha tenido que crear un Servei Lingüístic para implantar el catalán en sus centros comerciales.

Lo que tenga que ver un fabricante de muebles con la lingüística es asunto que no importa a unos poderes públicos obsesionados por controlar, intervenir, recortar las libertades individuales y diseñar una sociedad falsa, que nada tiene que ver con la real porque resulta del todo inexistente.

Bye, bye, Spain

La capa de ozono se recupera lenta pero progresivamente

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) confirma una recuperación “lenta pero progresiva” de la capa de ozono, si bien los niveles de 1980 no se restablecerán hasta el periodo 2060-2075. El pasado año fue además el séptimo en extensión máxima del agujero de ozono desde 1979, rompiéndose la tendencia de los años anteriores. En cuanto al año 2008, la formación del agujero ha comenzado relativamente tarde, pero su crecimiento está siendo “muy rápido”, según la citada fuente.

Estos datos se han dado a conocer con motivo de la celebración del Día Internacional para la Preservación de la Capa de Ozono, que conmemora la firma en la misma fecha de 1987 del Protocolo de Montreal. Tras el descubrimiento del agujero de ozono sobre la Antártida, el Protocolo de Montreal destacó la necesidad de una reducción drástica en la producción y uso de determinadas sustancias. Posteriores reuniones de seguimiento del protocolo aceleraron la fase de prohibición y añadieron nuevas sustancias a la lista de compuestos prohibidos, subrayó la agencia dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, que valoró que las prohibiciones han tenido éxito y se ha conseguido una reducción muy significativa en las emisiones.

A pesar de los buenos resultados, para que los efectos de esta reducción se hagan notar habrá que esperar, ya que la vida de estos compuestos es larga. Por ello, aunque se ha logrado reducir al mínimo posible la emisión de estas sustancias, los efectos de emisiones pasadas persistirán durante décadas. La Aemet advirtió además de que la recuperación de la capa de ozono en los próximos años se complicará debido a la compleja interacción entre ésta y el cambio climático.

Ello se debe a que, como cada año, al aproximarse la primavera austral comienza la destrucción de ozono sobre la Antártida. Durante el invierno austral se alcanzan en la estratosfera temperaturas muy bajas (por debajo de -78 grados), según los datos de la agencia española. Esas temperaturas son necesarias para formar las llamadas nubes estratosféricas polares, en cuya superficie se producen las reacciones químicas que llevan a la destrucción del ozono estratosférico en presencia de luz solar y de las sustancias destructoras de ozono que actúan como catalizadores de las reacciones.

Cambio climático

La última esperanza para la justicia española: la sociedad civil.

La pretensión de querer reformar la justicia española es evidentemente elevada. Pero lo es quizás mucho más si se trata de hacerlo desde nuestra prácticamente inexistente sociedad civil. Aún así, Rosalina Díaz, una de las grandes figuras en el mundo de la edición jurídica se ha fijado esta meta con la creación de la Fundación Wolters Kluwer, que se presentará en sociedad este próximo mes de octubre.

La mujer detrás de la nueva Fundación Wolters Kluwer es consciente de las limitaciones que tiene la sociedad española. “Yo creo que en España no existe una sociedad civil capaz de articular acciones y ponerse en marcha”, dijo Díaz a El Confidencial. “No hay plataformas civiles. Realmente están los partidos políticos y poco más”.

A pesar de ello, la directora general de una de las editoriales jurídicas más importantes de España considera que es esencial impulsar la calidad de nuestra justicia a través de la sociedad. “Es muy importante ver lo que los agentes económicos, jurídicos y políticos quieren de la justicia”.

Su idea ha sido respaldada incondicionalmente por un patronato de grandes nombres. “A todos les parece un proyecto interesantísimo”, dijo Díaz. En total son siete, todos ellos hombres –la única mujer es ella, que actuará como presidenta-, y de ideologias contrapuestas. Virgilio Zapatero, antiguo Ministro de la Presidencia durante el gobierno de Felipe González; Enrique Arnaldo, secretario general de la Fundación y ex vocal del CGPJ; Jaume Matas, antiguo Ministro de Medio Ambiente durante la presidencia de Jose María Aznar; Enrique López, actual portavoz del CGPJ y encargado de dirigir el; Jose María Michavila, antiguo Ministro de Justicia del PP; Miguel Rodríguez-Piñero, antiguo presidente del Tribunal Constitucional durante el gobierno de González y Juan Roca, ex rector de la Universidad de Murcia. Quedan por nombrar tres personas más, entre las cuales figurará seguro una mujer.

Dado que uno de los grandes males de la justicia española es su excesiva politización, resulta llamativo un experimento en el que representantes de los dos principales partidos politicos del país tratarán de solucionar lo que no hay manera de arreglar oficialmente. Díaz, aseguró que, pesar de la variedad ideológica, “cuando se sientan juntos da gusto”. A la jurista no le preocupa que sean de derechas, de izquierdas o de centro, “con tal de que sean profesionales del mundo en el que nos movemos”.

La agenda de los ciudadanos en lugar de la de los políticos

“Nosotros no nos vamos a meter en temas de organización judicial de tipo político, sino en aquellas cosas que afectan a los ciudadanos y a la actividad de la justicia”. Ejemplos hay muchos: número y reparto de jueces, turno de oficio, temas de extranjería, etc. La magnitud de los problemas se está midiendo a través del Observatorio de Calidad de la Justicia, que dirige Enrique López, que en estos momentos trabaja recopilando información para dar muy pronto unos datos.

Adicionalmente, las mesas redondas son otra muy buena vía para recoger las necesidades que las diferentes organizaciones demandan a la justicia. En la primera jornada de la Fundación, que coincidirá con su inauguración, se crearán dos mesas. Una económica, en la que figurarán la patronal, los sindicatos y representantes de los bancos. Una jurídica, en la que se integrarán los presidentes de los consejos más reconocidos en el ámbito legal: los registradores, los notarios y los abogados.

“Es una manera de dar voz a las cabezas visibles de esas organizaciones que están por debajo”, recalcó. “Nosotros tenemos que ser capaces de escuchar sus demandas para luego trasladarlas al ámbito de la justicia”.

Una vez recogida la información, su intención es trasladarla a la gente que puede realizar cambios estructurales en la justicia: al Ministerio de Justicia, al Poder Judicial, las Consejerías de Justicia, las Comunidades Autónomas y demás.

Financiación

La Fundación se nutrirá de las ganancias de la empresa Wolters Kluwer, una potente editorial jurídica de origen holandés que compró en 1994 a la editorial española La Ley. "Esperamos llegar a acuerdos con entidades públicas y privadas", dijo Díaz, añadiendo que “la reforma de la justicia nos tiene que interesar a todos”. Para la presidenta de la Fundación no hay duda de que crece el interés en el altruismo. “La gente acoge muy bien algo que les suponga hacer algo por otros sin intenciones económicas”.

el confidencial